La hostelería perdió 195.000 afiliados en 2020 y mantiene a 363.000 en ERTE
El drama que vive la hostelería por culpa de la pandemia y de las restricciones decretadas por las administraciones para atajarla ya se puede traducir en cifras. El sector sufrió durante 2020 la pérdida de 195.000 trabajadores afiliados a la Seguridad Social, lo que dejó la cifra total en 1,47 millones de personas, un 11% menos que al cierre del año anterior, según datos del Ministerio de Trabajo recogidos por CC OO.
La mayor caída se registra en el régimen general, en el que están incluidos la mayor parte de los trabajadores del sector. En este caso la pérdida es del 14% respecto a 2019 con 190.000 afiliados menos, mientras que los afiliados en el régimen de autónomos retrocedieron un 1,4%, hasta 4.622. Las Comunidades Autónomas más castigadas han sido las más expuestas al turismo. El sector hostelero de Baleares ha perdido el 26,5% de sus afiliados, por un 17,4% en Canarias, un 13% en Andalucía y un 12% en Cataluña. En número la que más trabajadores perdió durante el año fue la andaluza con 37,326 afiliados menos.
Pero a esas cifras hay que sumar a los trabajadores que se mantenían en ERTE a finales de 2020, un total de 363.657 personas, que sumados a los afiliados perdidos suman un total de 560.000 personas que CC OO define como "pérdida real" de empleo. Esa cifra es un tercio de todo el empleo que aglutinaba el sector al cierre de 2019.
El sindicato destaca "la importancia de haber prorrogado la vigencia de los ERTEs, y de las prestaciones (por desempleo, extraordinarias para fijos discontinuos) hasta el 31 de mayo. En este dramático escenario, gracias las fórmulas suspensivas y de reducción de jornada (ERTEs) se ha evitado un impacto mucho mayor sobre el empleo, y ha disminuido la incertidumbre antes descrita, pues es vital y estratégico el garantizar que el sector turístico y las personas que trabajan en el mismo tengan soporte económico suficiente para “aguantar el tirón", explican en un comunicado.
La tercera ola de la pandemia ha incrementado las restricciones sobre el sector. En la Comunidad de Madrid, que ha sido de las que más se ha resistido a medidas duras para esta actividad, ige desde hoy un toque de queda a partir de las 22:00 horas, lo que ha hecho desaparecer los servicios de cenas de la hostelería y la restauración.
Según la patronal regional Hostelería Madrid esto supondrá unas pérdidas diarias de 72 millones de euros al representar un recorte del 40% de la actividad. La Comunidad Valenciana también ha aplicado desde hoy el cierre total de la actividad hostelera, mientras que en Cataluña sigue vigente una limitación horaria por tramos: de 7.30 a 9.30 h y de 13 a 15.30 h.