Las 7 recetas de Jeff Bezos para triunfar en los negocios
El largo plazo, el cliente, las matemáticas y el valor de la acción, en el centro de su estrategia
Tenía cinco años cuando, en julio de 1969, vio por televisión a Neil Armstrong caminando sobre la luna. Un momento que trascendental en la vida de Jeff Bezos. “Recuerdo estar viéndolo desde nuestra televisión del comedor y el entusiasmo de mis padres y mis abuelos. Los niños pequeños pueden contagiarse de ese estado de ánimo. Cuando sucede algo extraordinario, son capaces de percibirlo. Ese día el espacio se convirtió en una de mis grandes pasiones”, recuerda el fundador de Amazon. Ese interés le convirtió en fan de Star Trek, serie que a su vez le despertó interés por los ordenadores. De hecho, tal y como se recoge en el libro Crea & Divaga. Vida y reflexiones de Jeff Bezos (Planeta), descubrió que podía jugar a un videojuego sobre el espacio en un terminal de la sala de ordenadores de la escuela de primaria en la que estudiaba en Houston, donde su padre trabajaba para Exxon. Su madre también alentó la curiosidad por la electrónica y la mecánica y le dejó convertir el garaje de su casa en un laboratorio de proyectos científicos. Se graduó en ingeniería electrónica e informática en Princeton, comenzó trabajando en el sector financiero, pero se sintió atraído por el crecimiento y las posibilidades que ofrecía la red informática. Se subió a ese tren, abriendo una tienda online de libros. Así fue como en 1995 comenzó a funcionar Amazon, que hoy vale en Bolsa 1,3 billones de euros.
1. Todo se reduce al largo plazo. Siempre consideró que una de las claves del éxito de los negocios es que el valor que se cree para el accionista sea sostenible. Y esto se traduce en que “cuanto más fuerte sea nuestro liderazgo de mercado, más poderoso será nuestro modelo económico”. Debido a este énfasis en el lago plazo, asegura que toman decisiones y plantean compensaciones de manera diferente de otras empresas, y sin tener en cuenta las consideraciones de rentabilidad a corto plazo o de reacciones de Wall Street. Y en lugar de “decisiones de inversión timoratas, tomaremos decisiones audaces allí donde constatemos probabilidad de obtener ventajas de liderazgo de mercado”, opina Bezos.
2. Obsesión: los clientes. Según datos de la propia compañía, más de cien millones de personas son miembros del servicio de suscripción de Amazon Prime. Su objetivo es tener la empresa más orientada al cliente del mundo. Sabe que les escogen por la oferta, por la facilidad de uso, por los precios y el servicio. “Pero no hay descanso para los incansables. A nuestros empleados les recuerdo que tengan miedo, que cada mañana se levanten atemorizados. No de nuestros competidores, sino de nuestros clientes”.
3. Pensar en clave financiera. Su principal medida financiera, y la que queremos emplear a largo plazo, es el flujo de caja disponible por acción, impulsado por el aumento de la cantidad de beneficio operativo y la gestión eficiente tanto del capital circulante como de las inversiones de capital.
4.Toma de decisiones. Muchas de las decisiones que se aprueban en Amazon están basadas en datos. “Hay una respuesta correcta y otra incorrecta, una mejor y otra peor, y las matemáticas nos dicen cuál es cuál”. Para la apertura de un centro logístico, por ejemplo, utilizan el historial de la red de gestión de pedidos actual para calcular los periodos de máxima actividad y crear modelos alternativos para ganar mayor capacidad, además de tener en cuenta la cartera de productos prevista, incluyendo el peso y el volumen de los productos para decidir el espacio. “El análisis cuantitativo mejora la experiencia del cliente y nuestra estructura de costes”, detalla Bezos, quien asegura que la fórmula más eficaz es combinar el análisis de datos con la voluntad de tomar decisiones audaces.
5. Encontrar la raíz del problema. “Yo también soy cliente de Amazon, y a veces también tengo problemas con un pedido”, asegura el empresario, que trata ese problema de la misma forma que los que le llegan a través de su dirección de correo electrónico, jeff@amazon.com, (a pesar de la enorme cantidad que recibe, señala que lee muchos de ellos). “La gente nos escribe porque hemos hecho algo mal y le pido al equipo de Amazon que realice un estudio del caso y que, tras encontrar la raíz real del problema, lo solucione de verdad”.
6. Generar riqueza. Confiesa que nunca ha pretendido conseguir el título de hombre más rico del mundo: lo es, con una fortuna de más de 185.000 millones de dólares, según datos de Bloomberg. “Me apetecía más ser conocido como inventor, emprendedor o padre. Estas cosas son un indicador de los resultados conseguidos”. Y valora el valor generado para otras personas, a través de la cotización de la compañía. “Creo en el capitalismo basado en el emprendimiento y en los mercados libres”.
7. Competencia. Para sostener la capacidad de inventar se necesita a la gente adecuada, a gente innovador. Y para competir con otras empresas no basta con ser uno de los mejores. Hay que ser el mejor.