Los inversores fuerzan la salida del CEO de Rio Tinto tras la destrucción de yacimientos aborígenes
Jakob Stausholm sustituirá a Jean-Sebastien Jacques
El gigante minero Rio Tinto ha nombrado a Jakob Stausholm como nuevo consejero delegado en sustitución de Jean-Sebastien Jacques, ante la rebelión de los accionistas a causa de la destrucción de un yacimiento aborígen en Australia. Stausholm, director financiero del grupo desde 2018, se estrenará el 1 de enero; Jaques dejará el puesto ese día y la empresa, el 31 de marzo. El veterano, con 27 años en la empresa, Peter Cunningham, será director financiero interino.
Stausholm tendrá que convencer a inversores, reguladores y legisladores australianos de que la empresa puede reparar los fallos de gobernanza en su división de hierro, que supuso el 90% de los ingresos en el primer semestre. También deberá lidiar con la expansión de una mina de cobre en Mongolia castigada por retrasos y sobrecostes.
Stausholm dijo que era "muy consciente" de la necesidad de restaurar la confianza de los accionistas tradicionales. Hasta el momento una figura de bajo perfil, estaba entre los ejecutivos que capitanearon los contacots con inversores, comunidades indígenas y legisladores después de que la empresa hiciera volar por los aires conscientemente unos yacimientos aborígenes de 40.000 años de antigüedad en el desfiladero de Jukkan, en Australia. Río Tinto, con sede en Londres, ha sido muy criticada por la escasa comprensión sobre los problemas de la comunidad en Australia Occidental, donde desarrolla gran parte de sus actividades
La salida de Jacques, que se unió a Rio Tinto en 2011 y se convirtió en CEO en 2016, se produce en medio de una gran en la industria minera, que afronta la desaceleración de la demanda de China y los movimientos para descarbonizar la economía mundial. BHP nombró Mike Henry CEO en enero, mientras que el veterano jefe de Glencore, Ivan Glasenberg, anunció en diciembre sus planes de jubilación. Será reemplazado por Gary Nagle.