Daimler acuerda pagar 1.900 millones en EE UU por el 'dieselgate'
El grupo alemán deberá afrontar una multa y compensaciones a los propietarios
Daimler pagará una multa de 2.200 millones de dólares (1.900 millones de euros) en Estados Unidos como parte de un acuerdo para cerrar una investigación de la administración y reclamaciones de 250.000 propietarios de vehículos por alterar las emisiones de sus vehículos diésel. Los acuerdos con las autoridades sumarán 1.500 millones de dólares, mientras que los alcanzados con los propietarios de los vehículos supusieran otros 700 millones.
El consorcio alemán informó el pasado 13 de agosto que alcanzó un principio de acuerdo para resolver todas las demandas asociadas al uso de un software ilegal para eludir las normas de emisiones. El fiscal general adjunto Jeff Rosen afirmó ayuer que los acuerdos, tras una investigación de casi cinco años, servirán para "disuadir a cualquier otro de violar las leyes ambientales en el futuro".
Según los documentos del tribunal, Daimler pagará a 250.000 propietarios hasta 3.290 dólares cada uno (2.764 euros) para reparar los vehículos contaminantes, además de 83,4 millones de dólares en gastos legales de los propietarios. Daimler señaló que niega las acusaciones "y no admite ninguna responsabilidad". El fabricante de automóviles alemán todavía se enfrenta a una investigación penal y podría afrontar sanciones adicionales.
Los acuerdos requieren que Daimler se ocupe de los excesos de emisiones los vehículos. Llamará a revisión coches y prolongará garantías, pero no está obligada a recomprar vehículos a menos que sea incapaz de reducir las emisiones dentro del calendario establecido.
El Departamento de Justicia dijo que Daimler no reveló al menos 16 dispositivos auxiliares de control de emisiones, "permitiendo a los vehículos operar de formas más deseables para el consumidor, incluyendo una mejor relación entre consumo y kilometraje".
Los vehículos diesel han estado bajo escrutinio en Estados Unidos desde que Volkswagen admitiera en septiembre de 2015 la instalación de un software secreto en 580.000 vehículos estadounidenses que permitieron superar en hasta 40 veces las emisiones legalmente permitidas. En septiembre de 2019, Daimler en Alemania aceptó pagar una multa de 870 millones de euros por infringir la normativa sobre emisiones de gasóleo.
Tanto Volkswagen como Daimler han dejado de vender vehículos diesel en EE UU. Fiat Chrysler alcanzó el año pasado un acuerdo por 800 millones de dólares para resolver las reclamaciones de los reguladores y los propietarios en este mismo sentido.