El consumo eléctrico se normaliza en los hogares y se recupera en la industria
REE detecta una reactivación de la actividad
El impacto que ha tenido el coronavirus durante la etapa de confinamiento en los hábitos energéticos de los hogares españoles y de la industria ha dejado una huella en la curva de consumo de ambos sectores que aún es visible en los registros. No obstante, la recuperación en la actividad industrial y la normalidad en los movimientos y en el ámbito laboral está devolviendo estos consumos a números más cercanos a la etapa pre-Covid.
En este contexto de recuperación, la curva de hogares e industrias está desandando el camino que inició con el estado de alarma y el confinamiento. La caída del consumo en la industria y el incremento en los domicilios, en ese momento, está dejando paso a una paulatina mejoría en las empresas y a una normalización en las familias.
Las familias solo gastan en junio un 2% más que el año pasado
La demanda llegó a caer un 19% en el periodo de hibernación de la economía, según datos de Red Eléctrica de España (REE), mientras que, por el contrario, el consumo en los hogares aumentó un 4%, cifras de la Asociación de Empresas de la Energía Eléctrica (Aelec).
A partir de ese momento, “la demanda se va recuperando parcialmente, registrándose reducciones de consumo entre un 10% y un 15% con respecto a fechas comparables de 2019, especialmente tras el fin del estado de alarma”, asegura Miguel Duvison, director general de operación de Red Eléctrica de España.
La OCU dice que ha cambiado la tipología de las quejas
Es más, el Índice de Red Eléctrica (IRE) del mes de junio, que mide la evolución sectorial de la demanda de electricidad en grandes consumidores, “indica que el alivio progresivo de las medidas de confinamiento se refleja en la reactivación de la actividad y el consumo eléctrico de las diferentes ramas productivas. Los datos de consumo presentan una mejora de seis puntos respecto a los registros de mayo”, afirma Duvison.
Las fuentes consultadas en Aelec coinciden en la misma dirección de mejoría en el consumo de la industria al asegurar que desde la semana del cinco de abril, que fue cuando cayó la demanda en este sector, con un 37% respecto a 2019, “se observa una recuperación del consumo eléctrico. En la última semana de junio, el descenso era del 13%” respecto al mismo periodo de 2019.
La normalización en el gasto de los domicilios es también apreciada por la patronal de las empresas de energía eléctrica. “En la última semana de junio, el crecimiento con respecto a la misma fecha de 2019 era ya solamente del 2%”.
Menos optimistas
Los que no esperan esa recuperación son los miembros de la asociación de empresas con gran consumo de energía (AEGE), que prevén para 2020 y tras el impacto de la pandemia del Covid-19 “una caída en su consumo de electricidad de entre un 10% y un 15% con respecto a la cifra de 2019, aunque algunas industrias concretas prevén incluso una disminución de hasta el 30%”, según Fernando Soto, director general de la asociación.
Desde la consultora especializada en eficiencia energética Creara Energy Experts, su presidente, David Pérez, cree que “el consumo de energía ya está mostrando signos de recuperación”, aunque admite que “habrá que esperar unos meses más para saber si los valores se recuperan”.
El presidente de Creara opina que hay que modificar los precios por periodos
Pérez llama la atención sobre los cambios que ha producido el confinamiento en las costumbres y los efectos que estos pueden traer en la relación entre los clientes y las comercializadoras. El teletrabajo, pasar más tiempo en casa y consumir la energía en tramos distintos a los tradicionales previos a la pandemia son algunos de estas transformaciones. “Modificación de precios por periodo”, “mayor rentabilidad” de las instalaciones de autoconsumo fotovoltaico y una “probable revisión” de la potencia contratada son algunas de estas transformaciones.
Hasta ahora, y según informan fuentes de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), “ha habido un aumento” en las reclamaciones y, además, “han cambiado su tipología”. Las razones son variadas, “facturas emitidas, manipulación de contadores, por altas y por daños derivados de cortes de electricidad”.
Entre el 1 de marzo y el 29 de junio hubo 1.218 reclamaciones relativas a suministros de luz y electricidad principalmente, recoge la OCU. Para la organización de consumidores, los consejos de ahorro que se ofrecen tradicionalmente siguen siendo válidos incluso con el teletrabajo y el hecho de permanecer más horas en casa. No obstante, admiten que “para algunos hogares no salga rentable la discriminación horaria” en estos meses de verano si se usa mucho el aire acondicionado.
Hacia una tarifa personalizada y a la carta
Cambios. El presidente de la consultora Creara, David Pérez, cree que el cambio en los hábitos de consumo define el futuro de la relación con las comercializadoras. Y adelanta alguna transformación: “La modificación de precios por periodo”. Si el consumidor gasta más en las horas centrales del día, habrá que adaptarse a la nueva realidad.
Iberdrola. Más de un millón de clientes usan ya Planes a tu medida, que “permite escoger al usuario del mercado libre la tarifa que mejor se adecúe a su forma de consumir, incluso eligiendo las ocho horas de mayor gasto”. El ahorro medio es de un 12%.
Endesa. La crisis del coronavirus ha impulsado la implantación de la tarifa Tempo Happy, con 1.300.000 clientes. Con esta modalidad, el usuario puede seleccionar las horas del día en las que tiene mayor consumo y esa energía le sale gratis en la factura. Happy 50 horas, donde esa cantidad de tiempo al mes sale gratis, y Happy 2 horas, un par al día sin coste, son las que utilizan la mayoría. Está también Happy Day de la semana, en la que no se paga por el consumo de un día en dicho periodo.
Naturgy. Ha introducido un descuento en el término fijo de la energía, “reduciendo el término de la potencia en un 25%, a diferencia de otras compañías”, que hacen la rebaja sobre la parte variable, informan en Naturgy. También ofrece un servicio de asesoría con las tarifas más óptimas para cada caso y según las necesidades que tenga el cliente y la situación que atraviese.