Renfe mantiene su plan de flota e inicia el lunes las adjudicaciones con la pugna Stadler-CAF
El primer contrato, de 31 unidades de ancho métrico y seis alpinas, está valorado en 287 millones
El ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha enmarcado la reactivación de la compra de trenes por parte de Renfe dentro del “cumplimiento de un compromiso”. Los resultados de la empresa pública van a resentirse en este 2020 tras perder 420 millones de euros en ingresos por servicios comerciales durante el estado de alarma, pero el plan de flota sigue vivo, con un presupuesto de hasta 5.100 millones.
El consejo de administración de Renfe, según ha anticipado Ábalos en su cuenta de Twitter, se reúne el lunes para adjudicar el primero de los pedidos: 31 trenes de ancho métrico (26 eléctricos y 5 híbridos), esencialmente para el servicio antes conocido como Feve, y seis trenes alpinos. El presupuesto total es de 287 millones y los competidores, según ha podido saber Cinco Días, son Stadler y CAF.
Este concurso de material rodante, licitado en enero del año pasado, irá a renovar la flota del País Vasco, Cantabria, Asturias, Galicia, Castilla y León, y Murcia, con 28 años de edad media, así como a sustituir los trenes de la línea madrileña entre Cercedilla y Cotos, que cumplen ya más de 40 años.
Un 80% de la puntuación dependerá del componente técnico, por el 20% que pesa la oferta económica
El contrato incluye el suministro de piezas de parque y el mantenimiento parcial de 12 unidades de ancho métrico y de las seis alpinas durante 15 años. En el sector ferroviario no son pocos quienes señalan que esta es la primera gran oportunidad para el fabricante suizo Stadler, con fábrica centenaria en Valencia y mucho menor presencia que CAF en la flota de Renfe. Un 80% de la puntuación dependerá del componente técnico, por el 20% que pesa la oferta económica.
La adjudicación se producirá una vez superada la congelación de los trámites administrativos durante buena parte del estado de alarma. Un paso al frente de la compañía pública que se toma como buena señal para un sector industrial que llevaba cuatro años sin pelear por un pedido de calado en España (el último fue el de los AVE de Talgo en 2016).
Los fabricantes cruzan los dedos para que después del verano el operador pueda adjudicar los trenes de Cercanías y Media Distancia. Fuentes de Renfe aseguran que “estas licitaciones siguen su curso”.
Concursos en marcha
El grueso del plan de renovación de la flota se lo lleva el contrato de 2.726 millones para el suministro de 211 trenes de Cercanías de gran capacidad (2.270 millones), sus piezas de parque y el mantenimiento de primer nivel durante 15 años. Renfe no encargaba unidades de Cercanías desde 2007 y por este contrato pugnan Alstom, CAF, Stadler y Talgo. En esta ocasión está previsto que el mantenimiento se lleve a cabo a través de una sociedad mixta con Renfe Fabricación y Mantenimiento.
Renfe ya se hizo con 289 unidades para Cercanías y servicios de media distancia entre 2005 y finales de 2007, con una inversión de 2.000 millones
Con un presupuesto de 295 millones, también está lanzada la licitación de 40 locomotoras que permitirán la creación de la nueva serie 107 de alta velocidad. Esto es formar trenes AVE con composiciones de coches Talgo en transformación.
Otro concurso en juego es del suministro de los primeros trenes de Cercanías híbridos (tracción diésel y eléctrica) y con eje de ancho variable, de los que se han pedido 38 unidades (29 más 9 opciones) por 365 millones. A ello se suma el mantenimiento de 11 de esos trenes durante 15 años, lo que eleva el montante del contrato a 474 millones.
Y con un presupuesto de 1.320 millones, la compañía que preside Isaía Táboas también licitó el suministro de hasta 105 trenes de media distancia (43 en firme y 62 opciones) junto a las piezas y su cuidado por 15 años.
Años de sequía
Renfe ya se hizo con 289 unidades para Cercanías y servicios de media distancia entre 2005 y finales de 2007, lo que supuso la renovación del 30% de la flota con una inversión de 2.000 millones. A partir de ese momento, la crisis hizo que se congelara cualquier compra más allá de los AVE pedidos entre 2016 y 2017.
La modernización del material rodante de Cercanías y Media Distancia se enmarca en la prestación de las obligaciones de servicio público (OSP) que Renfe tiene encomendadas hasta 2027, tal y como permite el Reglamento 2016/2338, con posibilidad de prórroga hasta 2032. Con su inversión en nuevos trenes, Renfe habrá renovado hasta el 50% del parque relacionado con los citados servicios públicos.
Parte de la financiación será europea
Apoyo del BEI. Renfe ha conseguido convencer al Banco Europeo de Inversiones (BEI) para financiar parte del voluminoso plan de inversiones para la renovación de su flota.La entidad pública europea tiene comprometidos 100 millones para sufragar el pedido de los trenes de ancho métrico que se adjudicarán este lunes. Otros 800 millones de crédito han sido otorgados para la adquisición de las unidades de Cercanías de alta capacidad. Y el BEI ha concedido hace poco más de un mes 320 millones de euros para la compra de un lote de 72 trenes de media distancia (17 eléctricos y 55 híbridos).
Unidades más grandes. Del mayor contrato lanzado por Renfe, el de los Cercanías de alta capacidad, los trenes contarán al menos con 900 plazas, lo que implica un 20% extra sobre el aforo de los actuales trenes Civia. De los 211 trenes pedidos, 176 tendrán 100 metros de longitud (lote 1) y otros 35 llegarán (lote 2) a los 200 metros. La licitación incluye la opción de adquisición de 120 trenes adicionales también en dos lotes (96 de 100 metros y 24 de 200 metros).