El Banco de Inglaterra amplía hasta 832.500 millones la compra de deuda
Mantiene los tipos de interés en el 0,1%
El Banco de Inglaterra dio hoy un paso más para apuntalar la economía británica ante la pandemia de la COVID-19 al ampliar en 100.000 millones de libras (110.873 millones de euros) su programa de alivio cuantitativo, de compra de deuda pública y privada, pero mantuvo los tipos de interés en el 0,1%. El Comité de Política Monetaria votó 8 a 1 a favor de hacer un mayor aporte al citado programa hasta situarlo en 745.000 millones de libras (832.500 millones de euros), si bien reconoció que el impacto de la pandemia en la economía británica puede ser "menos severo" de lo que se temía en un principio.
El banco emisor inglés optó, en cambio, por no modificar el precio del dinero a pesar de las conjeturas de algunos analistas de que los tipos podían bajar hasta el nivel histórico del 0%, a fin de evitar un posible colapso de la economía del país. El banco indicó que el retroceso económico puede no ser tan pronunciado por la recuperación del gasto del consumo y del mercado inmobiliario, aunque advirtió de que hay riesgos sobre un aumento del desempleo, que puede ser "continuo".
La medida de hoy fue tomada después de que el gobernador del banco, Andrew Bailey, indicase que los miembros del comité monetario estaban dispuestos a tomar nuevas medidas al conocerse que la economía del país sufrió un desplome por la pandemia. La semana pasada, la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS, en inglés) informó de que el producto interior bruto (PIB) del Reino Unido sufrió una contracción del 20,4% en abril pasado, una cifra mensual récord de caída, debido a la crisis sanitaria.
Ese dato, peor de lo estimado por los analistas británicos, correspondieron a un mes completo del confinamiento del Reino Unido por la pandemia, impuesto a finales de marzo. El retroceso del PIB respondió al parón económico por el cierre de tiendas, bares, restaurantes y fábricas, que debieron suspender a sus empleados por la repentina falta de ingresos.
Esa cifra de contracción es considerada la más importante desde que empezaran a registrarse este tipo de datos en 1997, y supera a la caída mensual del 5,8% registrada en marzo. A finales de marzo, el banco emisor inglés había bajado el precio del dinero del 0,25% al 0,1% para apoyar la economía, ante el impacto adverso provocado por la pandemia. El mayo, la ONS había informado de que el PIB retrocedió el 2% en el primer trimestre del año (enero-marzo), la mayor caída desde 2008 y señal de que el Reino Unido podía entrar en recesión.
De acuerdo con los expertos, el país va camino al peor trimestre (abril-junio) de retroceso económico de su historia, ya que la cifra de mayo puede ser igual de baja antes de un ligero repunte en la de junio debido a la lenta desescalada por la pandemia. La economía británica prácticamente quedó congelada el 23 de marzo cuando el primer ministro británico, Boris Johnson, anunció al país el confinamiento para contener el coronavirus.
Como medida para evitar el colapso del empleo, el Gobierno británico garantizó 330.000 millones de libras (366.300 millones de euros) en préstamos a empresas afectadas para que pudieran pagar hasta el 80% de los salarios de los trabajadores. Según la ONS, el número de asalariados con empleo fijo en el país bajó en 612.000 personas en los tres meses hasta finales de mayo, pero la tasa de desempleo se mantuvo en el 3,9%.
Esas cifras reflejan el impacto que el confinamiento ha tenido en el empleo en el Reino Unido, donde casi nueve millones de personas se vieron suspendidas de sus empleos. En cambio, el índice de precios de consumo (IPC) del Reino Unido se situó en el 0,5% en mayo pasado frente al 0,8% del mes anterior, con lo que se coloca en el nivel más bajo desde junio de 2016.
La caída, que se produjo cuando el Reino Unido cumplía con las medidas de confinamiento para contener el COVID-19, respondió sobre todo al descenso del precio de carburante y de la ropa. El Reino Unido empezó ya con la desescalada por la pandemia al autorizar el Gobierno la apertura este mes de junio de los comercios que venden productos no esenciales.