El Tesoro capta 6.886 millones en letras a seis y 12 meses a tipos más bajos
España cobra más por su deuda a corto plazo
El Tesoro acelera la financiación. En paralelo a la emisión sindicada 20 años, el organismo que preside Carlos San Basilio ha realizado una subasta de letras a seis y 12 meses en la que ha colocado 6.886 millones a tipos más negativos. Es decir, España cobra más a los inversores. El importe captado se sitúa en la parte alta del objetivo marcado por el Tesoro, que oscilaba entre los 6.000 y 7.000 millones en deuda a corto plazo.
El grueso del importe adjudicado, unos 6.105,8 millones, corresponden a letras a 12 meses al -0,313% frente al -0,08% de la puja anterior. España vuelve a profundizar en los rendimientos negativos y se aleja de la coyuntura vivida en abril, cuando el incremento de las tensiones en el mercado y el temor de los inversores a una reedición de la crisis de 2011 llevó al Tesoro a pagar por la deuda a un año. En letras a seis meses se han vendido 780 millones al -0,464% frente al -0,28% de la subasta del 5 de mayo.
El interés de los inversores por el papel español no ha disminuido, algo que ha quedado patente en las emisiones sindicadas realizadas desde el estallido de la crisis. En la subasta de letras la demanda de los inversores ha alcanzado los 13.751 millones. Es decir supone 1,99 veces la oferta.
Si por algo están marcadas las subastas celebradas en la pandemia es por que los importes colocados son mayores. Antes del estallido de la crisis el importe adjudicado se aproximaba a los 4.000 millones. Es decir, este cambio refleja cómo las necesidades de financiación han cambiado y son ahora mayores, algo que ha llevado al Tesoro a actualizar su estrategia de financiación para 2020.
El aumento de la deuda, que podría cerrar el año en el 120% del PIB, y el incremento del déficit, que según las previsiones de la Comisión Europea superará el 10% del PIB, ha llevado al Tesoro a elevar la emisión neta prevista para el ejercicio ha pasado de los 32.500 millones a los 130.000. Por su parte la emisión bruta también ha experimentado un incremento notable desde los 196.504 millones previsto a comienzo de año a los 297.352 millones anunciados hace dos semanas. No obstante los expertos señalan que a pesar de este cambio en la estrategia que supondrá un aumento del papel español en el mercado el papel del BCE garantiza la financiación de España. Esto permitiría mantener bajo control el coste de financiación que se sitúa hasta la fecha en el 2%, nuevo mínimo histórico.
Precisamente España es junto a Italia uno de los países que más se están beneficiando el programa de compra de deuda contra la pandemia, un mecanismo que ha sido ampliado tanto en tiempo como en importe por la institución que preside Christine Lagarde. Según los datos publicados la semana pasada, el BCE ha gastado 22.392 en deuda pública española.