El gigante aéreo Avianca entra en concurso y urge un salvavidas público en América Latina
La compañía se acoge al Capítulo 11 en EE UU para reestructurar la deuda mientras intentará mantener las operaciones
La segunda mayor aerolínea de América Latina, la colombiana Avianca, se tambalea ante la presión a que la crisis sanitaria del coronavirus está sometiendo al sector aéreo mundial. La compañía, con más de 30 millones de pasajeros al año, trata de eludir una quiebra que era ya inminente acogiéndose en Estados Unidos al conocido como Capítulo 11, para tratar de “reorganizar sus operaciones y completar la reestructuración financiera”, según explicó ayer el presidente del grupo, Anko van der Werff. La falta de liquidez hacía imposible la atención de los compromisos financieros.
Se trata de un escenario similar al del concurso de acreedores en España, por el que Avianca pretende seguir operando y asegura que atenderá el pago a sus proveedores. “La empresa tiene la intención de pagar a los proveedores y socios de agencias de viaje según sus prácticas normales, de manera oportuna por los bienes y servicios prestados a partir de la fecha de presentación y durante el proceso del Capítulo 11”, asegura en un comunicado. Solo en Colombia Avianca cuenta con 14.000 empleados (21.000 en todo el mundo) y trabaja con 3.000 proveedores.
Avianca tiene la mayor parte de su flota en tierra y sus ingresos caen un 80% desde mediados de marzo, ante lo que ha instado este concurso voluntario, que afecta a la matriz y varias filiales, ante el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York. Van del Werff ha recordado que la aerolínea ya se acogió al Capítulo 11 en 2003, tras lo que inició una expansión que la convirtió en un jugador esencial en América y en el salto hacia Europa.
Avianca, con una flota de 158 aviones, venía de rediseñar su red para mantener 130 rutas a 76 destinos en 27 países. La firma logró cerrar 2019 con un escueto beneficio que rozaba los 5 millones de dólares. La dirección espera ahora la respuesta de la justicia estadounidense a su petición.
En busca de ayuda pública
La firma aduce ante sus acreedores una disminución del 90% en el tráfico mundial de pasajeros y subraya estimaciones de la asociación Iata en las que se advierte de un impacto del Covid-19 cifrado en 314.000 millones de dólares en recorte de ingresos para este 2020. Mientras se busca la refinanciación de deuda comercial, con bonistas y bancos, Avianca ha lanzado un mensaje de emergencia de liquidez al Gobierno de Colombia, así como al resto de los principales Estados en los que tiene operaciones.
“Mientras se llevan a cabo estas conversaciones, Avianca tiene la intención de utilizar su liquidez junto con los fondos generados por sus operaciones en curso (como el transporte de carga), para apoyar el negocio durante el proceso de reorganización”, ha señalado la aerolínea a través de un comunicado. El consejero delegado ha hablado de la intención de mantener operaciones y salvar el empleo, aunque ya hay una primera medida sobre la mesa como es la reducción de la presencia de la aerolínea colombiana en Perú.
Antes de dar este paso para salvarse de la quiebra, Avianca había salvado una bola previa de partido al reestructurar su deuda en 2019 y tener en ejecución el plan Avianca 2021. Ahora, cada una de sus iniciativas para retornar al mercado, conforme se levanten las restricciones a los vuelos de pasajeros, serán revisadas por el citado Tribunal. El consejo y la dirección, no obstante, mantienen sus atribuciones.
Otra de las responsables de la aerolínea, la española Silvia Mosquera, ha garantizado el futuro servicio con la máxima seguridad, así como el programa de flexibilidad hasta el 31 de octubre respecto a cambios en las reservas sin penalización. Esto afecta a los billetes, vouchers y bonos de regalo adquiridos antes de que Avianca iniciara este proceso. Adicionalmente, los clientes continuarán acumulando millas cuando vuelen con la aerolínea, y podrán continuar canjeando las millas acumuladas a través del programa LifeMiles para volar con Avianca durante la situación de concurso.
Antes de pedir el Capítulo 11, Avianca ha ofrecido excedencias no remuneradas a la plantilla, ha rebajado salarios de forma temporal e inició un programa de recorte de costes.