La promotora Quabit anuncia un ERTE para el 66% de la plantilla
La inmobiliaria avanza que está revisando sus previsiones para 2020
Las dificultades con las que se enfrenta el sector promotor de vivienda por el parón de la economía por la pandemia y la desaceleración prevista para los próximos meses ya ha afectado en lo laboral a una de las inmobiliarias cotizadas. Quabit ha remitido este jueves a la CNMV que ha propuesto la representación de los trabajadores realizar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que afecta al 66% de la plantilla por causas productivas a consecuencia de la pandemia generada por el Covid-19. La causa definida es "adaptar su actividad a la situación actual y optimizar su funcionamiento durante los próximos meses", según explica la empresa al mercado.
"Quabit adopta esta difícil medida como refuerzo para mantener la estabilidad en el nivel de empleo y dar cobertura legal y laboral a sus empleados ante la crisis del coronavirus, confiando en contar con el apoyo y la colaboración de los trabajadores". La empresa, presidida por Félix Abánades, asegura que también los miembros del consejo de administración han acordado una reducción del 20% de su salario bruto.
El ajuste temporal del empleo y las reducciones de jornada se extenderán hasta final de año y afectan aproximadamente al 66% de la plantilla que Quabit tiene actualmente en sus delegaciones de Madrid, Guadalajara, Málaga y Valencia. En el planteamiento inicial, 38 personas reducirán su jornada laboral en un 50% y 22 al 100%, según la compañía. "No obstante, esta cifra de empleados podría variar en función del tiempo que se tarde en recuperar la normalidad, de cómo evolucione la crisis y de la magnitud de sus efectos económicos y sociales".
La crisis del Covid llega, además, en unos meses algo convulsos para Quabit. La promotora entregó el pasado año únicamente 157 pisos, una tercera parte de los 500 de la cifra prevista inicialmente, un número que ya rebajó en mayo desde las 900 inicialmente anunciadas. La inmobiliaria achacó en los resultados anuales a la “ralentización” en el ritmo de ventas. La empresa perdió 9,1 millones en 2010 frente al beneficio de 6,8 millones del año anterior.
La compañía se encuentra actualmente en negociaciones con los representantes de los trabajadores y, entre otras variables, está analizando la posibilidad de establecer un complemento salarial para mejorar las aportaciones del Estado.
Cómo afectará a la empresa
La empresa presidida por Abánades también avanza que se encuentra en pleno proceso de evaluación del impacto económico de la crisis en sus previsiones financieras para los próximos meses, e informará de todo ello una vez el contexto actual permita tener una buena visibilidad sobre el ejercicio 2020 y siguientes.
"La crisis actual está teniendo un impacto inmediato en la compañía y de manera general en el sector residencial. A la evidente pérdida de actividad se suman los efectos sobre el sector de la construcción que también hacen prever retrasos en las entregas de viviendas de las promociones", refleja el comunicado remitido a la CNMV.