Consejos financieros a autónomos y pymes para afrontar la crisis del coronavirus
Deutsche Bank aconseja realizar tests de estrés y analizar el modelo de inversión de las empresas.
¿Cuánto tiempo podrá soportar mi actividad la situación actual? ¿Necesito financiación? ¿Cuánta? ¿Durante cuánto tiempo? Son cuestiones que con esta crisis muchos autónomos y pymes se están preguntando en la actualidad. Desde Deutsche Bank han realizado un análisis de todos estos parámetros, para ofrecer consejos generales al respecto.
La primrea recomendación es realizar tests de estrés, para conocer el tiempo y las condiciones en las que puede resistir la empresa en un escenario como el actual. En este punto es importante, aseguran desde esta fuente, evaluar el tiempo que pueden las fuentes de liquidez de la empresa aguantar este entorno de estrés prolongado. Para ello, indican sobre la importancia de determinar las necesidades diarias de liquidez, los gastos fijos que hay y evaluar la posibilidad de que la compañía disminuya sus ingresos. Para ello es importante conocer el tiempo que puede estar la empresa en esta situación.
Aconsejan también que exista una buena relación con los bancos para conocer de primera mano la capacidad de financiación a la que se puede hacer frente.
Analizar el modelo de inversión de la empresa
A su vez, habrá que analizar el modelo de inversión de la empresa y de asignación del capital antes del impacto del Covid-19, así como revisar los saldos de caja, la liquidez y el riesgo de la cartera de inversiones, las compras de equipamientos, las vulnerabilidades en la estructura de capital, la exposición a las divisas o la gestión del efectivo, sin olvidar revisar la política de dividendos; las recompras, tanto de deuda como de acciones.
Evaluar la inversión y suministros
Por otro lado, también se recomienda a la empresa evaluar la situación financiera. Esto es, dada la situación global actual, recomendamos a la empresa evaluar su capacidad para financiar los vencimientos a corto plazo y analizar su situación de solvencia para poder hacer frente a demandas de liquidez inesperadas.
Por último, se aconseja evaluar la situación de la cadena de suministro, analizar el impacto del virus en el riesgo y el perfil crediticio y comercial de los proveedores.
