El Ibex cede un 0,6% pero logra mantener los 9.500 pendiente de China
Los inversores mantienen las dudas pese a las señales del BCE de una reducción de los riesgos económicos
A los inversores se le amontonan los acontecimientos. Temporada de resultados, reuniones de política monetaria, dimisiones políticas y por si no fuera suficiente un brote vírico con epicentro en la ciudad china de Wuhan. En este entorno, los inversores no encuentran razones suficientes para el entusiasmo y optan por deshacer posiciones en la renta variable. El clima de incertidumbre favorece la búsqueda de refugio en la deuda, un proceso que se ha visto acelerado con la reunión del BCE en la que el consejo de gobierno ha vuelto a apostar por la política acomodaticia, señalando que los tipos de interés continuarán en los niveles actuales hasta que no se vislumbre una convergencia sólida de la inflación. El Ibex 35 que horas antes del BCE llegó a registrar subidas cerró la sesión con un descenso del 0,58% en línea con las principales Bolsas de Asia, Europa y EE UU.
Las noticias que llegan desde el gigante asiático en referencia al coronavirus añaden inestabilidad al mercado. El temor que existía a comienzos de semana de que se restringieran los desplazamientos se hace realidad. Lo que en un principio se limitaba a Wuhan se extiende a otras ciudades días antes de la celebración del año nuevo, una fecha marcada por los desplazamientos. Las aerolíneas vuelven a ser las más golpeadas en una jornada en la que el índice CSI 300 ha caído un 3,1%, la mayor desde mayo de 2019.
En la Bolsa española IAG se convierte en uno de los valores más castigados con una caída del 4,22%. EasyJet y Ryanair que en los primeros días permanecían ajenas a los descensos en el sector turístico retrocede un 3,47% y un 2,41% mientras Air France y Lufthansa caen un 2,47%. En conjunto la industria que aglutina a aerolíneas y cadenas hoteleras se deja un 1,81%, descensos solo superados por los recursos básicos (-2,86%) y el sector del automóvil (-1,97%). En el marco del foro de Davos, las rencillas comerciales vuelve a primera línea. Mientras Francia amenaza con la tasa a las tecnológicas, EE UU contraataca con tarifas a los automóviles.
Los descensos de IAG en la Bolsa española solo fueron superados por las pérdidas del 5,34% que registró ACS después de la provisión de 400 millones de euros por la decisión de la filial australiana Cimic de no prestar apoyo financiero a su participada Oriente Medio. El tercer valor con peor desempeño fue Repsol (-3,46%).
Bankinter, que ha sido la encargada de abrir la temporada de resultados, logró salvar la sesión con un ascenso del 0,16%. Sabadell también escapó a las pérdidas mientras Santader, que hoy ha recibido la mejora de recomendación a comprar de UBS, cede un 0.14%. El resto de entidades que componen el Ibex se tiñen de rojo: BBVA cede un 0,72%; CaixaBank, un 1,07% y Bankia, un 1,16%.
El otro acontecimiento de la jornada lo ha protagonizado el BCE. Su ha vuelto a mostrar su preocupación por los efectos secundarios que pueden tener los tipos negativos, que por ahora se van a mantener un largo periodo de tiempo, aunque también ha subrayado que aún es pronto para plantearse esta situación. A pesar de ello, el consejo de gobierno ha reiterado que los tipos continuarán bajos, lo que ha contribuido a la caída de las rentabilidad. El bono a diez años baja al 0,36%, niveles del pasado noviembre. Por su parte, la deuda alemana al mismo plazo cae por debajo del -0,3%, algo que no sucedía desde diciembre. La prima de riesgo italiana vuelve a estar por debajo de los 160 puntos básicos, un día después de la dimisión de Di Maio.
El Tesoro ha acudido hoy a los mercados en busca de financiación. Allí, el organismo dependiente del Ministerio de Economía ha captado 4.973,16 millones de euros en bonos a 3, 5 y 30 años. La demanda total ha escalado hasta los 8.489,2 millones. En cuanto al coste de financiación, el tipo de interés es menos negativo en el caso de los bonos a tres y en la deuda a cinco años. En cambio, en las obligaciones a 30 años, el tipo de interés marginal se ha reducido en la actual subasta.
En este entorno, el euro cae ligeramente frente al dólar: se deja un 0,4% hasta 1,105 dólares, cota más baja desde noviembre.