Juan Pepa, el impulsor de Neinor, sale de la promotora
Esgrime falta de tiempo por su dedicación a la sociedad Stoneshield Capital
El primer alma mater de la promotora Neinor Homes abandona el consejo de administración de la inmobiliaria. El directivo argentino deja su posición donde actuaba como consejero externo, según comunicó este jueves la compañía a la CNMV. La razón que ha esgrimido Pepa es que la renuncia se debe “al incremento de actividad previsto en Stoneshield Capital, sociedad de la que es socio fundador, y la consiguiente reducción del tiempo disponible para el consejo de la sociedad”.
La salida de Pepa se produce tras el cambio accionarial, en la que el fondo francés Orion Capital ejerce como principal socio desde finales de septiembre con el 28% del capital.
Pepa fue el hombre fuerte de Lone Star hasta 2017. El directivo, con el apoyo del fondo texano, revolucionó el sector promotor español con el lanzamiento de Neinor Homes en 2015, tras comprar la inmobiliaria a Kutxabank. Fue la primera apuesta clara por la necesidad de construir vivienda en España, tras el parón por la brutal crisis del ladrillo. Además, planeó la salida a Bolsa de la promotora, que se produjo en 2017 y que fue la primera en una década en el sector. También fichó a Juan Velayos como consejero delegado, quien pilotó los inicios de la compañía hasta principio de este año.
El ejecutivo argentino ha tenido como socio en esta aventura inmobiliaria a Felipe Morenés, hijo de Ana Botín, que se mantiene como consejero externo. Pepa hizo ganar mucho dinero a Lone Star en Neinor, pero también recibió críticas soterradas en el sector porque el fondo estadounidense vendió sus participaciones en la promotora pocas semanas antes de lanzar un profit warning. También levantó dudas que el siguiente principal accionista en entrar en la compañía, el fondo argentino-israelí Adar, eligiera a su hermano Jorge Pepa como consejero. Actualmente Jorge es vicepresidente ejecutivo de la empresa, nombrado este año tras el segundo profit warning y después de la renuncia de Velayos. Tras las dos rebajas de previsiones de negocio de la compañía (con referencia al plan inicial propuesto a los inversores) su valor bursátil se deja más de un 30% respecto al de su debut.