Siemens Gamesa realizará 109 despidos en España en otro ajuste
Recorte en las oficinas de eólica terrestre de País Vasco, Madrid y Navarra
Siemens Gamesa (SG) realizará un nuevo ajuste laboral dentro de la estrategia de reducción de costes que ha llevado a cabo desde que se creó el grupo con los activos eólicos de Siemens y de Gamesa en 2017. En este caso son 600 despidos, centrados en las áreas administrativas y de dirección de la división del negocio terrestre.
A España le "tocan" 109 salidas, según los sindicatos, que recaerán en la sede de Zamudio (Bizkaia) y en las delegaciones de Pamplona y Madrid. Markus Tacke, consejero delegado del grupo renovable, abogó por "medidas blandas", lo que remite a salidas negociadas. El mayor ajuste caerá en las oficinas de Dinamarca (201 despidos) y en Alemania, con otros 99. Las oficinas de Reino Unido perderán once empleos y otros cinco las de Italia.
Los recortes se repartirán por Polonia (tres), Francia (dos) y uno en Bélgica, además de otras bajas en Estados Unidos (EE UU), China e India.
Es la tercera batería de ajustes laborales en la corporación renovable en apenas dos años. La primera reconversión acarreó 6.000 despidos, casi 400 en España, incluyendo el cierre de la fábrica de palas de Miranda de Ebro (Burgos). Después llegó otro recorte de 600 empleos, hasta el actual, que también afecta a 600 trabajadores, ninguno de las fábricas.
Tacke quiso aclarar que la integración de la planta de palas de Vagos (Portugal), adquirida a la alemana Senvion, no supondrá recortes de capacidad en los centros españoles porque las instalaciones lusitanas servirán para reducir la dependencia de SG de los proveedores asiáticos y esquivar así los problemas arancelarias y comerciales en esa zona del planeta, donde sigue latente la amenaza de una guerra comercial entre EE. UU. y China.
Pero el consejero delegado reiteró que SG estará en "un ajuste continuo" para adaptarse a "los requisitos del mercado".
El anuncio del nuevo ajuste llegó con la presentación de los resultados de 2019, ya que SG cierra su ejercicio al 30 de septiembre. Duplicó sus beneficios netos y ganó 140 millones.Las ventas, de 10.230 millones, registraron un incremento del 12,1%. La cartera de pedidos está en niveles de récord, con proyectos valorados en 25.507 millones.
Tacke y David Mesonero, director financiero de Siemens Gamesa, rebajaron las previsiones de negocio para 2020, un año que calificaron de "transición" porque las inversiones en eólica marina entran en un ciclo bajo por la propia dinámica temporal de estos proyectos, tecnológicamente muy complejos y con los países muy lentos a la hora de conceder permisos para nuevas explotaciones en sus aguas. Además, los aerogeneradores marinos son los que más margen dejan.
Lo anterior, unido a la coyuntura de presión en precios para los productores de turbinas, ha llevado a SG a recortar sus previsiones de Ebit (beneficio operativo) a una banda del 5,5% al 7,1% sobre ventas, unos márgenes que pudieran mejorarse a medio plazo, a partir de 2022, para situarse entre el 8% y el 10%. Para 2020, Siemens Gamesa prevé una tímida mejora de las ventas, hasta una horquilla entre los 10.200 y los 10.600 millones.
La reacción de la Bolsa a estas estimaciones fue inmediata. El valor de SG cayó hasta un 14 % en la apertura de la sesión para luego atenuar el desplome. Cerró la jornada con una cotización por encima de los 11 euros y tras un retroceso de más del 8 %.
En 2020, la empresa prevé recortar 600 millones en costes para cumplir con el ahorro de 2.000 millones previstos en el plan 2018-2020.
Preguntado si la buena situación financiera del grupo, con una caja neta de 863 millones y una reducción de la deuda en 1.000 millones en 2019, animaría a la compra de empresas del sector, Tacke especificó que siempre está atento a las oportunidades que sumen valor a SG. Como la compra de activos de la compañía alemana Senvion, que está en concurso de acreedores.
La tensión en precios ha llevado a la crisis a bastantes proveedores de componentes eólicos. Ahora quedan media docena de grandes fabricantes de turbinas, y SG "tiene la suficiente fortaleza para afrontar el futuro", según uno de los mensajes lanzados ayer por Tacke.
La multinacional renovable invertirá 600 millones en 2020 en la construcción de fábricas en Francia y Taiwan. En el país galo tiene contratos que suponen el suministro de turbinas marinas que sumen 2,5 GW.