Los tripulantes de Ryanair amenazan con paralizar la aerolínea diez días en septiembre
Los sindicatos Sitpla y USO convocan una huelga en las 13 bases de la compañía en España
Los sindicatos han pasado a la acción en su lucha contra Ryanair para evitar el cierre de las bases que la aerolínea irlandesa tiene en Gran Canaria, Tenerife y Girona. SICTPLA y USO han registrado esta mañana el preaviso de huelga en las 13 bases en las que Ryanair opera en España para diez días de septiembre: 1,2, 6, 8, 13,15, 20, 22, 27 y 28.
De esta manera, los sindicatos intensifican la presión sobre la aerolínea a la espera de que Ryanair atienda sus peticiones durante el acto de mediación, que se celebrará en los próximos días. “De no haber acuerdo, la huelga se convocará de manera formal. Dudamos mucho de la predisposición de Ryanair a llegar a un acuerdo, e incluso a presentarse con talante negociador. Más de un año de reuniones en organismos oficiales españoles con actitud de burla hacia los mismos no nos hacen albergar la más mínima esperanza de entendimiento”, avanzó Jairo Gonzalo, secretario de Organización de USO-Ryanair.
Amenaza contundente
El objetivo del preaviso de huelga es evitar el cierre de esas tres bases, que forma parte de un plan global de la compañía para tratar de compensar los malos resultados económicos y la crisis de los Boeing 737 MAX, que redujo su flota operativa . “El motivo de dicha huelga es impedir el cierre de las bases de Gran Canaria, Tenerife Sur y Girona, si en este último caso se confirmase lo anunciado como intención, así como los despidos que de ese cierre se derivase en el personal directamente contratado por Ryanair y el que aún está ilegalmente en las agencias satélite”, explicó Manuel Lodeiro, portavoz de SITCPLA. “La huelga está convocada por una amenaza contundente, expresada no sólo en la mesa, sino personalmente en las bases de Gran Canaria y Tenerife”, recalcó el portavoz sindical, que añadió que los problemas generales con Ryanair no obedecen a este hecho aislado, “sino a un proceso de incumplimientos reiterado que ha abocado a la decisión más drástica que puede tomar una plantilla en defensa de sus puestos de trabajo”. De hecho, las dos centrales sindicales que presentaron ayer el preaviso de huelga en España ya advirtieron antes de verano que convocarían paros en septiembre si finalmente la compañía llevaba a término los ajustes de bases y recortes con los que amenazaba desde febrero.
La sección sindical del sindicato español de pilotos de líneas aéreas (Sepla) en Ryanair realizará una votación entre sus afiliados a los que planteará si realizar movilizaciones en respuesta a la amenaza de despedir a 100 pilotos que hizo la compañía irlandesa recientemente. En el resto de Europa, el sindicato Balpa, que defiende los intereses de los pilotos británicos de Ryanair, ha convocado jornadas de huelga para el 22 y 23 de septiembre y entre el 2 y el 4 de septiembre. En Irlanda, el sindicato Fórsa ha votado a favor de ir a la huelga, con el respaldo del 25% de la plantilla de pilotos.
Cierre en enero de 2020
La aerolínea irlandesa comunicó a principios de agosto a los sindicatos su intención de cerrar las bases de Tenerife Sur, Las Palmas, Girona y Faro (Portugal) en enero de 2020. De llevarse a cabo esa medida podría afectar a más de 1,4 millones de plazas aéreas que ya estaban programadas para el primer semestre del año, según un estudio de Mabrian Technologies, en colaboración con InterfaceTourism Spain. La compañía justificó el cierre de esas bases por la entrega tardía de hasta 30 aviones 737 MAX este invierno y aclaró desde un primer momento que ninguna ruta se verá afectada, ya que serán atendidas por vuelos desde otras bases a partir de noviembre cuando comience el horario de invierno.
Fue el propio consejero delegado de Ryanair, Michael O’Leary, el que anticipó en un vídeo la pasada semana que la compañía se verá obligada a acometer despedidos, al asegurar que a la compañía le sobraban 500 pilotos y 400 asistentes de vuelo. Los ajustes se realizaran en primera instancia a finales de septiembre y posteriormente en Navidad como consecuencia del fuerte ajuste del beneficio que registró la aerolínea. En el tercer trimestre de su ejercicio fiscal, finalizado el pasado 30 de junio, registró un resultado de 243 millones de euros, un 21% menos que un año antes.