El 68% de los directivos defiende mantener su empresa familiar
Solo el 41% tiene una alta confianza en sus planes de sucesión, según Deloitte
Los dueños de las empresas familiares defienden la continuidad de estas firmas por parte de la saga familiar. Una de las características de sus propietarios es que orientan estas firmas a largo plazo al anteponer la esencia del negocio a cualquier desafío. Eso es al menos lo que se desprende del informe Global Family Business Survey 2019, realizado por Deloitte.
Así, el 68% de los líderes de este tipo de compañías ratifica estos principios y afirma querer que su empresa continúe siendo familiar.
Entre los 791 ejecutivos encuestados en 58 países, el 36% afirma que evitaría ceder el control familiar para obtener un mayor éxito financiero en el futuro. Un 34% si estaría dispuesto a negociarlo y el 30% restante no lo sabe.
Según explica Fernando Vázquez, socio responsable de empresa familiar de Deloitte, “los ejecutivos de empresas familiares prefieren mantener el negocio en la familia, pasarlo a la próxima generación, salvaguardar y aumentar su capital y preservar sus tradiciones familiares y su legado. El desafío, en este sentido, es que la estrategia a largo plazo vaya de la mano con las acciones que realizan en el corto espacio de tiempo”.
En cuanto a los pilares del negocio, los líderes de las empresas encuestadas demuestran tener un optimismo moderado en sus planes de sucesión, que han diseñado para un periodo de entre 10 y 20 años. Solo el 41% afirma tener una confianza alta o muy alta en este ámbito, aunque algunos reconocen no haberlos desarrollado todavía. En el caso de las empresas españolas consultadas, esta percepción aumenta tres puntos porcentuales. Los otros aspectos clave en que los encuestados demuestran tener una mayor confianza son la propiedad familiar (59%), gobernanza (51%), y estrategia (54%). En España, estas cifras varían levemente con 56%, 50% y 66%, respectivamente.
Las compañías familiares tienen la característica de poder adaptarse rápidamente a los entornos cambiantes. Según el 61% de los encuestados, este atributo es el más importante de sus compañías. Dicho porcentaje aumenta al 72% en el caso de las empresas españolas.
También consideran relevantes otras características distintivas de las empresas familiares, tales como la capacidad de innovación (aspecto más importante para el 39% de los encuestados) y la posición financiera (32%), que son senciales para mantener su negocio en los próximos 10 ó 20 años. Solo el 21% de los encuestados, que pasa a ser del 11% en España, cree que la lealtad del cliente impulsará la sostenibilidad de sus negocios, a pesar de que muchas empresas familiares tradicionalmente han confiado en una base de consumidores fieles.
“Este hecho constata que la lealtad del cliente ya no es un hecho. La digitalización, la disponibilidad de información y de datos comparativos están cambiando rápidamente la forma en que los consumidores interactúan con las empresas”, afirma Fernando Vázquez.
Entre los factores que tendrán el mayor impacto en los mercados durante los próximos 20 años, el 50% cree que será la adopción de tecnología en el puesto de trabajo. En el caso de España el porcentaje pasa a ser del 56%. Esto apunta a la necesidad de adaptarse al cambio tecnológico para afrontar el riesgo de situarse detrás de los competidores.