La Feria del Libro de Madrid cierra con récord de facturación
Las ventas han alcanzado los 10 millones de euros y se han vendido alrededor de 550.000 ejemplares
Las casetas de la Feria del Libro de Madrid bajaron este domingo las persianas y se despidieron del parque del Retiro hasta el año que viene. La 78º edición del certamen cierra con 550.000 ejemplares vendidos y una facturación récord de 10 millones de euros, una cifra que no se había alcanzado hasta ahora y que supone un 14% más que el año pasado.
El buen tiempo que ha acompañado a los 17 días en los que ha transcurrido la feria ha sido un aliciente para que alrededor de 2,3 millones de personas decidieran acercarse hasta alguna de las 361 casetas que conformaban el recorrido. Un público que, como es habitual, cuenta con un mayor peso femenino, las mujeres representan cerca del 64% de los asistentes. Una proporción que no se repite en el caso de las autoras, que son un 42% de los alrededor de 1.800 escritores que han estado firmando estos días.
La última novela de Isabel Allende, Largo pétalo de mar (Plaza & Janés, 22,90 euros), encabeza las listas de los libros más buscados este año. Un nombre al que también se suman títulos como Reina Roja de Juan Gómez-Jurado (Ediciones B, 20,90 euros), Voces de Chernóbil de Svetlana Alexiévich (11,95 euros), impulsada por el éxito de la serie de HBO, Vida. La gran historia de Juan Luis Arsuaga (Destino, 20,90 euros), El director de David Jiménez (Libros del K.O, 18, 90 euros), Lluvia fina de Luis Landero (Tusquets, 19 euros), Si esto es una mujer de Noemí Trujillo y Lorenzo Silva (Destino, 19 euros) y Formas de estar lejos de Edurne Portela (Galaxia gutemberg, 18,90 euros).
A pesar del récord, el peso económico de la cita en la facturación de las librerías no es determinante para la industria editorial, pero sí supone un buen empujón, sobre todo de cara a la temporada veraniega, donde las transacciones decaen. “El mercado del libro interior mueve 2.600 millones de euros al año, los 10 millones de la feria son un porcentaje muy pequeño, pero generan un entorno de fomento de la lectura y eso sí que no tiene valor”, comenta el director ejecutivo de la Federación de Gremios de Editores de España, Antonio María Ávila. Dicho esto, todo suma, añade.
“Las ventas son cada vez más estacionales y se concentran en momentos pico, como la Feria del Libro, así que tenemos que acostumbrarnos y crear más de estos eventos para atraer a los lectores”, explica el secretario del Gremio de Librerías de Madrid, Pablo Bonet. El portavoz lamenta que el flujo de gente hacia las librerías sea cada vez menor y asegura que no son establecimientos pasivos, “sino sitios donde ocurren cosas, se organizan encuentros y humanizan los barrios”. Por este motivo, considera que el certamen es una manera de entablar relación y acercarse a públicos que no acuden normalmente a estos establecimientos. Y ante el auge de las plataformas de venta online, recuerda: “Un librero siempre recomienda mejor que cualquier algoritmo”.
Por su parte, Ávila celebra que los hábitos de lectura de los españoles sigan creciendo, aunque reconoce que aún hay mucho camino por delante. “Estamos en una sociedad que requiere la actualización permanente y exige mucha formación, y la manera de conseguirlo es apoyarse en los libros”, afirma. En este contexto, los niños y los jóvenes son, con diferencia, los más lectores de la población española. El 98% de los menores de 14 años declara leer por gusto, no solo como parte de la obligación escolar, y su media oscila en torno a un libro por semana, según explica el gerente editorial de literatura infantil y juvenil de SM, Gabriel Brandariz. Este porcentaje cae en la adolescencia, pero aún así se mantiene por encima del 70%. Esta afición también se refleja en el público de la feria: alrededor del 22% de los asistentes tiene menos de 25 años.
En este sentido, el portavoz de la editorial apunta que en los últimos años se está produciendo un cambio de paradigma en la literatura infantil y juvenil: quien firma el libro tiene más peso que los personajes o el argumento a la hora de comprar. “En esto, las estrellas son los youtubers”, comenta. LunaDangelis, Javier Ruescas, Soy Una Pringada y Elashow son algunas de las firmas más perseguidas en esta edición por los más jóvenes. También instagramers como María Turiel y personalidades del mundo de la música como Rozalén formaron largas colas. Más allá de estos nombres, series como Los futbolísimos de Roberto Santiago (SM, 11,95 euros) son las grandes estrellas en esa franja de edad.