Santander y los sindicatos pactan las condiciones del ERE para 3.223 empleados
El acuerdo rebaja un 13% los afectados y mejora las condiciones para los menores de 55 años
La dirección de Banco Santander y los sindicatos con mayor representación en la entidad financiera en España lograron ayer un acuerdo para reducir la plantilla en 3.223 empleados, un 13,30% menos que lo anunciado al comienzo de las negociaciones (inicialmente el banco pidió la salida de 3.713 personas). Además, ambas partes consiguieron ponerse de acuerdo para mejorar las condiciones de los trabajadores que quieran dejar el banco menores de 50 años.
De esta forma, sindicatos, entre los que destacan CC OO y UGT, y Santander tienen previsto firmar el acuerdo definitivo el próximo lunes a las 10 de la mañana. El preacuerdo ha sido secundado por el 79% de los representantes sindicales.
El banco había ofrecido sucesivas mejoras en las condiciones hasta la firma del preacuerdo ayer, sexta reunión de negociación del ERE. La principal mejora, además de la reducción de afectados (hasta el miércoles estaba sobre la mesa la salida de 3.464) ha sido una prima de 15.000 euros para los empleados de 50 a 54 años. Éstos serán indemnizados con seis anualidades del 60% del salario bruto anual, en un único pago y con un tope de 380.000 euros. Además, se firma un convenio con la Seguridad Social para cotizar hasta los 63 años y una prima de 30.000 euros para los trabajadores con más de 15 años de experiencia.
Para los trabajadores entre 55 y 57 años Santander ofrece el 75% del sueldo (mejora incluida ayer) y un convenio especial con la Seguridad Social también hasta los 63 años. Los empleados con 58 años tendrán el 78% del salario, y los de entre 59 y 61 años, el 80% (como en el ERE de 2018). Esta oferta se limita a empleados con más de 15 años en el banco.
A los trabajadores con menos de 50 años o con una antigüedad inferior a 15 años en la entidad, el banco ofrece una indemnización de 40 días de salario por año trabajado con un máximo de 24 mensualidades, una prima lineal de 15.000 euros y otra que va en función de la antigüedad: 25.000 euros para los empleados con entre 10 y 15 años en la entidad, 15.000 para los que tengan entre cinco y 10 años y 5.000 para los que lleven menos de cinco años.
Para los empleados con 62 años o más, el banco ofrece una indemnización de 20 días por año trabajado, con el límite de una anualidad.
En cuanto a las indemnizaciones por movilidad geográfica, el banco pagará 0,19 euros por kilómetro. Entre los 26 y los 50 kilómetros la paga de movilidad durará un máximo de cuatro años e incluirá un pago de 2.500 euros. Entre los 50 y los 75, el límite será de cinco años y el pago, de 3.500 euros. Los sindicatos, de hecho, han conseguido que al final se limite la movilidad a 75 kilómetros.
En el acuerdo se mantiene el cierre de las 1.150 oficinas proyectadas desde el inicio para reducir las duplicidades generadas tras adquirir Popular y que dan lugar al ajuste que se acaba de negociar de plantilla.
En CCOO reivindican el esfuerzo del sindicato, junto al del resto, para que el “perímetro de puestos de trabajo destruidos fuera el menor posible” y que quienes se adhieran lo hagan desde la voluntariedad garantizando una salida con recursos suficientes “para ofrecer una renta sustitutiva digna”.
“No debemos olvidar lo que por muy repetido no deja de ser cierto: las últimas reformas laborales han precarizado las relaciones laborales hasta el extremo que este expediente podría haberse implantado por la empresa sin acuerdo sindical y con las indemnizaciones legales de 20 días por año y no hay nada más que mirar al entorno para comprobarlo”, recuerda CCOO en una nota.
UGT, por su parte, también se felicita por el acuerdo, aunque mantiene que “nunca es bueno un ERE”.
Considera que el acuerdo que se va a firmar es positivo si se compara con otros ajustes, incluido el de Banco Popular de hacer casi tres años; pero reconoce que es ligeramente peor que el suscrito con el propio Santander en febrero de 2018, con la salida de 1.100 empleados de los servicios centrales.
Según aseguran fuentes sindicales, el banco, a través de la consultora que ha realizado el informe que justifica este ERE, ya no sería necesario un nuevo ajuste de plantilla por lo menos a largo plazo.
Santander se comprometió a principio de las negociaciones del presente ERE a recolocar al 100% de los 3.223 trabajadores que serán despedidos, siempre que quieran seguir trabajando fuera de la entidad.
El banco espera cerrar el grueso de las salidas de este ERE este mismo año, según lo tiene contabilizado en sus presupuestos, aunque fija marzo de 2020 como fecha tope para finalizar el proceso.
Las salidas coinciden con la integración total de la red de Banco Popular con la de Banco Santander, aunque al final casi el 80% de las sucursales del banco resuelto hace dos año serán clausuradas en breve. De esta forma, se dará por concluido la unificación de los dos bancos.
Por otro lado, CaixaBank ha mantenido este jueves también reuniones con los sindicatos con el objetivo de encontrar las vías para reducir el número de trabajadores que se han apuntado al ERE. La entidad quiere que el proceso de salidas finalice el 1 de agosto.