Goldman Sachs ve una posible alza de rating este año para España pese a las elecciones
Contempla tres posibles coaliciones de Gobierno y sobrepondera la deuda soberana española frente a la de Francia e Italia
La positiva marcha de la economía española no va a sufrir un tropezón a causa de la celebración de las elecciones generales del próximo 28 de abril, que prometen dejar un Parlamento muy fragmentado y abrir un complicado período de negociaciones para la formación de Gobierno. Goldman Sachs se muestra optimista respecto a España, en una visión que comparte también para Portugal, e incluso contempla la posibilidad de que ambos países puedan beneficiarse de una mejora de rating en la parte final del año.
"Pensamos que podrían darse tres posibles coaliciones de gobierno después de un período de negociaciones", señala el banco estadounidense sin precisar siglas políticas. Tales opciones contemplan distintos planteamientos presupuestarios y de reformas estructurales pero coinciden en un aspecto fundamental para Goldman Sachs y en el que coincide la comunidad inversora. "Todos ellos estarían comprometidos con el proyecto europeo, con la solidez de las finanzas públicas y la competitividad de la economía", señala el banco estadounidense.
Aun así, Goldman también hace una advertencia. Apunta que los cambios económicos es posible sean más graduales que transformadores, lo que hace que sea improbable que tengan efecto notable en el crecimiento económico. "La limitación en la agenda de reformas implica cierto riesgo de complacencia", añade.
Goldman Sachs confía en que España, al igual que Portugal -donde hay un gobierno socialdemócrata y en el que el Partido Socialista lidera las encuestas para las elecciones legislativas de octubre-, continúen creciendo por encima de la media europea, después de haber logrado una asignación más eficiente de los recursos y mejorado en competitividad. Y apunta a que podrían beneficiarse de la mejoría económica que la firma pronostica para la zona euro en la segunda mitad de 2019.
En su escenario base, Goldman Sachs no prevé que Estados Unidos imponga aranceles a la industria europea del automóvil, ni que haya nuevos episodios de tensión en Italia que impacten en otros países de la región. Así, los riesgos que ve para las economías de España y Portugal son externos y a la baja, aunque también recuerda su elevado endeudamiento y que su capacidad fiscal es limitada y que por lo tanto no pueden emprender una rebaja de impuestos significativa.
En este contexto, Goldman Sachs destaca que el mercado está valorando el crecimiento positivo en España y Portugal y espera que la rentabilidad de la deuda soberana de ambos países supere a la de la deuda de Italia y Francia. También tiene un pronóstico favorable para los bancos españoles, ya que prevé para 2019 el primer incremento neto del crédito en casi una década, aunque este factor puede verse neutralizado por el riesgo de litigios, según advierte.