Independencia económica: ¿jubilarse a los 40 es posible?

¿Cuáles son mis objetivos vitales? ¿Cuál es su coste? ¿Cómo invertir?

En Estados Unidos se habla desde hace unos años del FIRE movement, es decir, aquellas personas cuyo objetivo es conseguir la independencia financiera y jubilarse pronto (las siglas corresponden a Financial Independence, Retire Early). Un deseo muy extendido, que, en el caso de algunas personas, especialmente entre los de la generación millennial, ha avanzado a un objetivo con un plan de acción concreto. Y el éxito se apoya en una vida más frugal para incrementar el ahorro y en invertirlo bien. ¿Es posible jubilarse a los 40 años?

De acuerdo con algunas informaciones que surgen cada cierto tiempo en algunos medios de comunicación y con los blogs que cuentan cómo sus autores alcanzaron el éxito en este objetivo, sí es posible. Pero requiere un esfuerzo de ahorro muy intenso. Algunos estiman que habría que ahorrar al menos el 50% de los ingresos para acercarse a esta independencia económica temprana.

Esta idea de la independencia financiera temprana ya la explicaban en su libro Tu dinero o tu vida a principio de la década de 1990 Vicki Robin y Joe Domínguez. Desde entonces, ha habido alguna otra publicación. Pero ha sido en los dos últimos años cuando se han intensificado las noticias en medios de comunicación relatando casos de éxito.

Uno de los blogueros más conocidos que ha conseguido “jubilarse” cuando otros apenas están comenzando su carrera profesional es Peter Adeney, que cuenta en Mr. Money Mustache que se retiró en 2005, con 30 años. Entre sus artículos destacados se encuentran uno titulado “El lujo es otra debilidad” y “Frugalidad: la nueva fantasía”, que dan una idea del plan que llevó a cabo el joven canadiense. Hay muchos más ejemplos, como 1.500 días para la libertad, que explica que para él “el ahorro siempre fue lo primero” y que se propuso la independencia económica en poco más de cuatro años, o Jubilado a los 40… basta con una búsqueda en Google, para encontrar en el último año innumerables entradas.

Hay quien critica este movimiento y considera que terminara debilitándose, mientras que otros defienden con firmeza que está aquí para quedarse, aunque no se convierta en un movimiento de masas. También muchos señalan que, en realidad, estos jóvenes “jubilados” no están del todo retirados, ya que el simple hecho de participar en charlas o conseguir ingresos contando cómo consiguieron su objetivo constituyen fuentes de ingresos.

La importancia de tener una hoja de ruta

Más allá de si es posible alcanzar a los 30, o los 40 (o a los 50 o en algún momento antes de la edad legal de jubilación) la independencia económica, lleve esta aparejada el cese completo de actividad o signifique simplemente desarrollar una agenda de actividades propias con la libertad que da el no necesitar ingresos, estas historias de personas que consiguieron este objetivo nos pueden servir para plantearnos una serie de preguntas, que nos ayuden a reflexionar sobre cómo trazar un plan financiero puede ayudarnos a conseguir nuestros objetivos vitales.

Evidentemente, además de evitar lujos, como querer el mejor coche o la mejor casa que nos podemos permitir y de evitar actividades sociales que conlleven costes elevados, etc., alcanzar la independencia económica a los 40 años es muy difícil salvo que se tenga cierto nivel de ingresos y que se haya ahorrado desde muy muy temprano, e invertir ese dinero con acierto para conseguir rentabilidad por el mismo. Y hay que entender que los ejemplos de los blogs que hemos mencionado parten de una situación diferente, la estructura del mercado laboral y salarial en el mundo anglosajón, y en el estadounidense en particular, es muy diferente de la de nuestro país.

Pero lo que sí podemos hacer todos es plantearnos objetivos realistas acordes con nuestras circunstancias vitales, profesionales y económicas. ¿Qué significa para mí la independencia económica? ¿Cuáles son mis objetivos vitales? ¿Cuál es el coste de mis objetivos? ¿Cuánto tengo que ahorrar para conseguirlo? ¿Cómo debería invertir mi dinero para alcanzar mis metas?