El pequeño comercio ‘arrastrado’ al Black Friday, para no perder ventas
Descuentos especiales en tiendas de proximidad, para obtener parte del pastel, principalmente promovido por grandes superficies y el comercio online
Producto del marketing norteamericano, el Black Friday está cada vez más asentado en España. El sector del comercio se ha sumado a este fenómeno en los últimos años, y se espera que el próximo 23 de noviembre se registren cifras históricas en ventas, especialmente de carácter online.
No obstante, y a pesar de su crecimiento, la contención del consumo hace pensar que crecerá a un menor ritmo que en años anteriores, algo que según la Confederación Española de Comercio tendrá su repercusión en las ventas del pequeño y mediano comercio español.
Desde la CEC se estima que, al igual que en 2017, más del 40 por ciento del comercio de proximidad se verá arrastrado a adherirse al Black Friday, para no perder ventas frente al comercio electrónico y otros grandes formatos comerciales. “Las promociones oscilarán entre el 20 y el 30 por ciento de descuento, con el objetivo de no ver lastrados sus márgenes”, avanzan.
“Este ‘viernes negro’ servirá para vender los stock acumulados, por lo que impulsará las ventas este mes, al igual que en noviembre del pasado año.
Punto de partida para la campaña navideña
La cercanía de esta fecha con el mes de diciembre hace que el Black Friday sirva en muchos casos como el pistoletazo de salida a la campaña navideña. Muchos consumidores adelantan sus compras a estas jornadas, por lo que para el presidente de la CEC, lo que el consumidor se gaste ahora no se lo gastará en Navidad ni en Reyes y viceversa.
“La apuesta más importante para el pequeño y mediano comercio debe seguir siendo la campaña de Navidad y Reyes, y no el Black Friday”, analiza.
Medidas de apoyo
Una vez más desde la Confederación Española de Comercio se ha aprovechado la ocasión para reclamar más apoyo para el sector por parte de las instituciones.
Para Manuel García-Izquierdo, este es un problema “más serio de lo que a simple vista pueda parecer”, ya que el declive del sector “redundaría en la pérdida de miles de empleos y autónomos”.