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Banca

Santander ejercerá su derecho de tanteo para recuperar la Ciudad Financiera

La oferta del banco se ha quedado cerca de la primera El precio final podría estar en los 2.100 millones tras restar la deuda de la sociedad

Ana Botín, en una imagen de archivo.
Ana Botín, en una imagen de archivo.

Santander podría recuperar en las próximas semanas la Ciudad Financiera construida en el municipio madrileño de Boadilla del Monte, y que es actualmente su sede operativa.

Los hermanos Simon y David Reuben, asentados en Londres pero de origen indio, han presentado la mejor oferta por estas instalaciones en el concurso de acreedores de Marme Inversiones, el propietario del inmueble. Los hermanos Reuben han realizado su oferta a través de su brazo inversor Reuben Brothers, registrado en Madrid como Sorlinda Investment.

Sin embargo, fuentes próximas al proceso recuerdan que antes de que se cierre la operación el grupo que preside Ana Botín puede ejercer su derecho de tanteo por la propiedad que vendió el 12 de septiembre de 2008 en 1.904 millones de euros, y se convirtió en la mayor operación financiera de España en años. De momento, Santander ha presentado la segunda mejor oferta, solo superada por la de los hermanos Reuben, según estas mismas fuentes, y a escasa distancia. De hecho, otras fuentes mantienen que la oferta de los hermanos Reuben tiene como objetivo recuperar fondos, más que quedarse con este gigante arquitectónico.

Si la oferta de Reuben no convence al juez, último que tiene la palabra en este proceso, Santander también tendría casi todas las opciones, ya que su oferta ha sido la segunda mejor.

Otras fuentes cercanas a este proceso, sin embargo, insisten en que Ana Botín no quiere perder esta oportunidad y el grupo está dispuesto a ejercer su derecho de tanteo para igualar la oferta de los hermanos Reuben. La adjudicación, no obstante, tiene que ser ratificada por el juzgado a cargo del concurso de Marme y Santander podría optar por judicializar el proceso, ya que al parecer el banco español tiene una interpretación del proceso, y la administración concursal otra.

El aún consejero delegado de Santander y próximo presidente de la entidad financiera en España, José Antonio Álvarez, ya reconoció esta posibilidad. "Hemos hecho una oferta por la Ciudad Financiera y tenemos la posibilidad de ejercer el derecho de tanteo a un determinado precio", anunció el número dos del grupo en la presentación de resultados del tercer trimestre de Santander, celebrada el pasado día 31 de octubre.

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La Ciudad Financiera de Banco Santander alberga los servicios centrales de la entidad, de ahí la importancia que tiene para el gigante financiero.

El propietario del inmueble, Marme Inversiones, está en concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos), y el juzgado mercantil número 9 de Madrid es el encargado de liquidar sus activos, por lo que tendrá la última palabra entre las ofertas recibidas por la Ciudad Financiera.

En esa puja ha participado también un fondo kuwaití (AGC) y, según distintas informaciones, también el inversor británico de origen iraní Robert Tchenguiz, todos ellos dispuestos a ofrecer más de 2.000 millones, aunque la cifra podía elevarse a 3.000 millones porque Marme acumula 900 millones en liquidez en su caja.

La recompra de la Ciudad Financiera tendría sentido para Banco Santander ya que con esta operación el grupo se ahorraría los 120 millones de euros anuales que paga por ocupar el inmueble y que se van actualizando según el contrato de alquiler firmado por 40 años a contar desde 2008, cuando vendió las instalaciones.

La Ciudad Financiera se planificó en la época de presidencia de Emilio Botín para ahorrar los costes que suponían los 23 edificios que ocupaban en Madrid capital los servicios centrales del grupo y aumentar la eficiencia de sus trabajadores. En aquella época, el banquero también destacaba que con ese nuevo espacio mejoraría la calidad de vida y trabajo de los empleados. El proyecto faraónico, diseñado por el arquitecto irlandés Kevin Roche, costó 480 millones de euros, incluyó la construcción inicialmente de nueve edificios, 400.000 metros cuadrados y más de 5.000 plazas de aparcamientos. Entre esos nueve edificios destacaba el Pereda, donde se encontraba el despacho de Emilio Botín y la sala del consejo de administración.

En los últimos años, las continuas obras de mejora y ampliación dotaron a la Ciudad Financiera de un nuevo espacio llamado El Faro, un cubo acristalado junto a uno de los accesos al recinto.

Santander vendió la Ciudad Financiera a Marme con un contrato con la sociedad de arrendamiento por un plazo de obligado cumplimiento de 40 años durante los que la renta se actualizaría anualmente al IPC. El contrato incorporó la opción de compra ejercitable por el banco al vencimiento del periodo de obligado alquiler por el valor de mercado que tuviera la Ciudad Financiera. Pero Marme Inversiones 2007 se declaró en concurso de acreedores en 2014.

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