El golpe maestro de Pedro Sánchez a costa del impuesto hipotecario
La banca asegura que se vuelve a la casilla de partida, pero ahora es el Gobierno quien se apunta el tanto Las entidades continúan con su plan de trasladar el gasto del AJD al precio del crédito
Los bancos se consideran en esta ocasión los muñecos balancines a quienes políticos, justicia y sociedad pueden menear y mover de un lado para otro. La lamentable actuación del Tribunal Supremo sobre la sentencia del impuesto de actos jurídicos documentados (IAJD) de las hipotecas con la rectificación ayer sobre su propio criterio para volver a los orígenes, debe ser el cliente el que asuma estos gastos, dejó perplejas a estas entidades, que ya habían asumido que esta carga la tendrían que asumir ellas a partir de ahora. “Ya lo habíamos asumido, solo reclamábamos que no existiese retroactividad”, explica un banquero.
Pero si inicialmente les sorprendió, y por qué no, incluso gratamente el fallo final del Supremo, hoy (para muchos ayer, ya que alguno conocía el proyecto del Ejecutivo) les ha vuelto a sorprender el Gobierno, con el anuncio de Pedro Sánchez de aprobar un real decreto en el que se recoja que sea la banca la que tenga que pagar este impuesto hipotecario, pese al cambio de criterio de los magistrados.
“Volvemos a la casilla de partida. Estamos preparados para asumir ese coste desde el pasado 18 de octubre, aunque no estuviéramos de acuerdo. Nuestra lucha hasta ayer era defender que siempre habíamos acatado la ley, y así lo haremos nuevamente, pero no estábamos de acuerdo en que tuviéramos que asumir una retroactividad por cumplir con las normas durante 23 años”, explica un alto directivo de una entidad financiera.
Eso sí, añade, “el giro ayer del Supremo devuelve la seguridad jurídica al sector, algo fundamental para la banca, y que se ha visto en la subida de las acciones de las entidades financieras”.
Varias fuentes financieras, sin embargo, coinciden en destacar que el anuncio realizado hoy por Sánchez es un golpe maestro para el Gobierno. “Es una medida oportunista y populista, pero con ella el Ejecutivo ha logrado apuntarse un gran tanto en clave electoral a costa de la banca, que en este caso no ha hecho nada ilegal, ni abusivo ni de falta de transparencia. Solo acatarnos a una norma ”, explican. Además, “aunque no lo admitamos públicamente ya estábamos preparados para ello. Ya teníamos planes para subir los diferenciales de las hipotecas, aunque la competencia es la que manda es estos momentos. Y las subidas del precio del crédito estará en función de esta rivalidad comercial.
Otra fuente de un destacado banco afirma que al final “todo este lío del impuesto de las hipotecas ha vuelto a revolucionar a la sociedad contra la banca, pese a que no estemos encausados. Las sentencias del Supremo obedecían a un contencioso entre una comunidad de vecinos y la agencia tributaria, pero lo que queda de eso es la mala imagen de las entidades financieras”.