El conflicto del taxi dispara el número de huelguistas y de horas perdidas en julio
El mes pasado 48.652 trabajadores pararon, un 161% más que en ese mes de 2017 La huelga feminista del 8-M y la de estudiantes en Cataluña contra el 155 han elevado los paros en lo que va de año
La lucha abierta a finales de julio entre los taxistas y los conductores de Vehículos de transporte con conductor (VTC) ha disparado las cifras estadísticas de conflictividad laboral del mes pasado.
En julio se registraron menos huelgas que en el mismo mes de 2017 (34 este año frente a 38 hace un año). Sin embargo, el número de trabajadores implicados se disparó hasta 48.652, lo que supuso un 161% más que en el mismo mes de 2017. E igualmente, el número de horas perdidas por huelgas creció en julio un 21,7% hasta 1,21 millones de horas que se dejaron de trabajar por conflictos laborales.
Si el análisis se hace respecto al mes anterior, el impacto es aún mayor: el número de trabajadores implicados creció un 300% –de 12.273 en junio a 48.652 en julio– y el número de horas perdidas aumentó un 147% -desde las 493.992 horas en junio a 1.219.220 el mes pasado–.
Estas son las cifras facilitadas hoy por los técnicos de la patronal CEOE, que atribuyen claramente a la huelga del taxi toda España este aumento de la conflictividad.
En general las cifras sobre huelgas y horas perdidas por los paros en lo que va de año son también más elevadas de lo habitual debido al éxito que tuvieron las distintas huelgas y paros organizados en toda España con motivo del Día de la Mujer el pasado 8 de marzo.
El efecto del 8-M también ha disparado los indicadores de conflictividad laboral de los siete primeros meses de este año. Entre enero y julio, aunque también hubo un 36% menos huelgas que en el mismo periodo del año anterior, la suma de trabajadores que participó en ellas creció un notable 219% hasta las 631.741 personas.
Asimismo, las horas que se han perdido por huelgas en lo que va de año superan los nueve millones y se han incrementado un 46% respecto a los siete primeros meses del ejercicio pasado.
Otras causas
Si bien, estos incrementos de la conflictividad laboral en todo este año no solo obedecen a la huelga feminista del 8-M y al reciente conflicto entre los taxistas y los VTC en julio pasado. Los empresarios también responsabilizan a la huelga de estudiantes de Cataluña contra la aplicación del artículo 155 en abril pasado; y a los paros y protestas en toda España ante la sentencia de La manada en mayo.
Al margen de todas estas huelgas, CEOE también analiza los conflictos que tienen su origen exclusivamente en las relaciones laborales, como son los casos de rupturas de negociaciones de convenios colectivos; salarios impagados; sistemas de trabajo o demandas salariales, entre otras. Los indicadores reflejan un descenso en general de este tipo de conflictividad en las empresas.
Así, entre enero y julio se produjeron 232 huelgas de carácter estrictamente laboral –excluyendo los paros y protestas en empresas o servicios de carácter público–, lo que supuso un 38% menos que en el mismo periodo del año anterior. También descendieron un 19% las horas perdidas por estos paros (hasta los dos millones) y los trabajadores que participaron en estas huelgas, que fueron un 1,74% menos (40.669).