Hacienda reclama a las autonomías presupuestos más restrictivos para 2019
Reconoce que hay que trabajar con la meta de déficit que marcó Rajoy Los adelantos a cuenta a las comunidades crecerán el 7,23%
Las comunidades autónomas tendrán que ponerse manos a la obra para elaborar los Presupuestos de 2019 partiendo de unos objetivos de déficit más restrictivos, los que marcó el anterior Gobierno de Mariano Rajoy. Así lo confirmó ayer la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, durante la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), en el que reconoció que el objetivo déficit de 2019 para las comunidades autónomas tendrá que ser del 0,1% y no del 0,3% como había propuesto el Gobierno y había presentado ante Bruselas. Así, el rechazo que la senda de déficit hasta 2021 diseñada por el Gobierno sufrió el viernes pasado en el Congreso y el veto que prevé imponer el PP en el Senado, donde cuenta con mayoría absoluta, a esos objetivos de déficit obligan al Ejecutivo de Sánchez a plegarse a las metas de déficit público diseñadas por el anterior Gobierno de Mariano Rajoy, los únicos que cuentan con el visto bueno de ambas Cámaras, imprescindible para su implementación.
Montero admitió ayer que “no hay ningún dato sobre la posición de las formaciones políticas que nos permita pensar” que la propuesta del Gobierno pueda salir adelante, fundamentalmente por la postura en contra del PP, que controla el Senado. Aun así, y tras el rechazo sufrido en el Congreso, Montero también insistió el viernes pasado en que volvería presentar la misma senda de déficit dentro de un mes, para lo que se abría un periodo de negociación con las fuerzas políticas. Pero incluso si las nuevas metas de déficit salieran adelante en el Parlamento, el PP ejercería su bloqueo en el Senado, lo que necesariamente aboca a realizar unos Presupuestos de 2019 más restrictivos.
Las comunidades autónomas dejarán por tanto de disponer de los 2.400 millones de euros adicionales de gasto que les concedía el Ejecutivo para 2019, gracias a un objetivo de déficit más holgado que no saldrá adelante. Ayuntamientos y autonomías tampoco podrán beneficiarse de una flexibilización de la regla de gasto que el Ejecutivo había vinculado a la aprobación de la senda de déficit.
Pese a unos Presupuestos más restrictivos para 2019, la titular de Hacienda también comunicó a las comunidades que las entregas a cuenta del próximo año ascenderán a 102.920 millones de euros, lo que supondrá un incremento del 7,23% respecto al año anterior. Los recursos que el Estado transferirá el próximo año a las comunidades autónomas por la recaudación de impuestos como el IRPF y el IVA –en definitiva, su financiación total– se elevará a 108.058 millones de euros netos, una vez que se incorpore la liquidación del ejercicio 2017 y que se cifra por encima de los 6.000 millones de euros.
El Consejo de Política Fiscal y Financiera también aprobó ayer por unanimidad los planes económicofinancieros presentados por Cataluña, Asturias, La Rioja, Murcia, Comunidad Valenciana, Aragón, Castilla-La Mancha, Extremadura, Madrid y Castilla y León. Estos planes habían obtenido previamente el visto bueno de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef), según establece la Ley de Estabilidad Presupuestaria.
Déficit público
El déficit del Estado cerró el primer semestre del año en 9.012 millones de euros, una cifra que equivale al 0,74% del PIB y que supone una reducción del 28,8% con respecto al mismo periodo de 2017. Según los datos de ejecución presupuestaria de junio publicados ayer por el Ministerio de Hacienda, el déficit es el resultado de unos ingresos de 92.483 millones, un 8,2% más, y unos gastos de 101.475 millones, un 3,5 % más. En términos primarios –es decir, sin tener en cuenta los intereses devengados–, el Estado se anotó un superávit de 4.004 millones, el 0,33% del PIB.
La reforma de la financiación autonómica, para largo
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, pidió ayer a los responsables autonómicos rapidez para que nombren a los expertos que participarán en el grupo de trabajo que elaborará el nuevo modelo de financiación autonómica a partir de septiembre.
Montero se mostró cauta sobre que la nueva financiación pueda estar lista para el final de la legislatura, tal y como habían avanzado algunos consejeros, y situó la reforma ya para la legislatura siguiente. “Soy optimista con el nuevo modelo de financiación si podemos avanzar a un ritmo adecuado y si los trabajos técnicos preparatorios y políticos avanzan, para que se pueda poner en marcha desde el primera día de la próxima legislatura”, señaló.