AT&T y Comcast en deuda, no en riesgo
Ambas compañías acumulan un débito de unos 350.000 millones de dólares
AT&T y Comcast están asumiendo unos 350.000 millones de dólares de deuda entre los dos para satisfacer sus caprichos. Si bien las cantidades son similares, el riesgo no lo es. Después de cerrar la compra de 85.000 millones de dólares en efectivo y acciones de Time Warner la semana pasada, AT&T tendrá una deuda neta de 2.9 veces su ebitda ampliado.
Comcast, que ha realizado una oferta en efectivo de 65.000 millones de dólares para los activos internacionales y de entretenimiento de Twenty-First Century Fox, y una oferta adicional para Sky, la filial con sede en Reino Unido, está dispuesta a endeudarse aún más. Con más de 170.000 millones de dólares cada uno, los compradores serán las dos compañías privadas más endeudadas del sector privado en el mundo.
La situación de AT&T parece más precaria por dos razones. En primer lugar, las ganancias de la teleco liderada por Randall Stephenson crecen lentamente, lo que limita la velocidad a la que puede pagar la deuda. Según Eikon, las previsiones indican que su ebitda se reducirá en los próximos tres años. Sin embargo, se espera que Comcast crezca alrededor del 5% anual antes de cualquier acuerdo con Fox.
En segundo lugar, una gran parte del flujo de efectivo de Stephenson se consume a través de generosos dividendos, que han aumentado cada año desde los años ochenta. El rendimiento de dividendos de AT&T del 6% es más alto que el del 4% en sus bonos a cinco años. El rendimiento de los dividendos de Comcast es más cercano al 2%, y a diferencia de AT&T, está pagando todo en efectivo por sus discutidos tratos.
Comcast debería poder reducir su deuda más rápido. Regresará a la deuda neta de dos veces el ebitda dentro de cinco años, según estima la compañía. En cuanto a AT&T, si aumenta sus pagos a los accionistas en aproximadamente un 2% al año y gestiona un crecimiento ebitda anual del 1%, aún tendrá una deuda neta por encima del doble del ebitda.
En un impulso, AT&T podría recortar sus dividendos si sus negocios centrales de redes y satélites disminuyen más rápido de lo que ya lo están haciendo, lo que no será popular. Y es otro área donde el CEO, Brian Roberts, tiene la ventaja: como accionista controlador de Comcast, tiene más libertad, si la necesita, para probar una medicina poco apetecible.
Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Daniel Domínguez, es responsabilidad de CincoDías.