BBVA y Sabadell aseguran que cumplen con las nuevas exigencias del colchón anticrisis
La JUR les exige un ratio MREL que las dos entidades aseguran tener ya sobradamente
BBVA ya ha recibido hoy la comunicación de Banco de España sobre su requisito mínimo de fondos propios y pasivos admisibles (el requisito MREL, más conocido como el colchón anticrisis) establecido por la Junta Única de Resolución (JUR), donde se indica que BBVA deberá alcanzar, a partir del 1 de enero de 2020, un volumen de fondos propios y pasivos admisibles correspondiente al 15,08% del total de pasivos y fondos propios de su grupo de resolución, a nivel subconsolidado, a 31 de diciembre de 2016 .
A 31 de diciembre de 2016, el total de pasivos y fondos propios del grupo de resolución ascendía a 385.647 millones de euros, ya que MREL no aplica al balance total del Grupo BBVA, sino a un perímetro europeo, del que BBVA, S.A. representa alrededor del 95%. Los activos ponderados por riesgo del grupo de resolución a esa fecha ascendían a 207.362 millones de euros
Este requisito MREL (colchón que sirve para asumir pérdidas en caso de quiebra), en términos de activos ponderados por riesgo del grupo de resolución a 31 de diciembre de 2016, ascendería a 28,04%.
Según las estimaciones del propio banco, la actual estructura de capital y pasivos computables del grupo de resolución se encuentra en línea con el citado requisito MREL exigido.
El plan de financiación mayorista de BBVA prevé asimismo la refinanciación de los vencimientos de deuda senior preferente y cédulas correspondientes al periodo 2018-2020 mediante la emisión de pasivos admisibles, siendo este plan consistente con el cumplimiento del requisito MREL.
A 1 de enero de 2018, los citados vencimientos pendientes ascendían aproximadamente a 9.000 millones de euros. De esta cifra, BBVA ya ha emitido, en 2018, 2.500 millones de euros de deuda senior no preferente - en febrero, emitió 1.500 millones de euros, a un plazo de cinco años, en formato flotante; y en abril, colocó un bono verde de 1.000 millones de euros, a un plazo de 7 años. El resto, 6.500 millones de euros, se emitirán de aquí a 2020, un volumen de emisión muy asumible para una entidad como BBVA.
Por su parte, Banco Sabadell ha asegurado en un hecho relevante remitido a la CNMV que "ha recibido la comunicación por parte del Banco de España, como autoridad de resolución preventiva a nivel nacional, de la decisión adoptada por la Junta Única de Resolución (JUR) respecto a los requerimientos mínimos de fondos propios y pasivos admisibles (MREL en sus siglas en inglés) que le son aplicables"
Según la entidad financiera esta decisión establece un requerimiento mínimo de MREL a nivel consolidado del 22,7% de los activos ponderados por riesgo calculados a 31 de diciembre de 2016 y un período transitorio para su cumplimiento que vence el 1 de enero de 2020. La decisión se basa en la legislación vigente, se actualizará cada año y podría estar sujeta a modificaciones posteriores por parte de la autoridad de resolución. Según asegura en el hecho relevante, la decisión de MREL "está alineada con las previsiones de Banco Sabadell y contemplada en el plan de financiación incluido en su plan estratégico para 2020".
¿Qué es el MREL?
MREL retende que las entidades europeas cuenten con un volumen de fondos propios y pasivos con capacidad de absorber pérdidas en el caso de que el supervisor declare la entidad inviable. El requisito MREL se determina entidad a entidad.
La Directiva de Recuperación y Resolución Bancaria (BRRD, por sus siglas en inglés) creó este requisito para asegurarse de que las entidades en problemas cuenten con fondos propios y pasivos admisibles suficientes para, en primer lugar, absorber posibles pérdidas y, en segundo lugar, recapitalizarse por sí mismas, sin necesidad de recurrir a dinero público. De esta forma, el objetivo del colchón de fondos propios y pasivos es evitar que los contribuyentes carguen con rescates bancarios.