Powell "sorprende".
El "debut" público de Jerome Powell como presidente de la Reserva Federal ha resultado ser más duro de lo previsto. Ayer, martes ante el Comité de Servicio Financieros del Congreso para presentar el informe semestral de política monetaria, se ha mostrado más "hawkish"/halcón (proclive a un endurecimiento de la política monetaria) de lo que se anticipaba. Entre sus palabras cabe destacar "...a pesar de la reciente volatilidad, las condiciones financieras siguen siendo acomodaticias" lo que viene a significar que con independencia de como reaccionen los mercados financieros, el plan de subida de tipos de interés por parte de la FED sigue intacto y sólo dependiente de la evolución/perspectiva de la actividad económica.
En este sentido, dado que el mercado continua evaluando que hay pleno empleo y mayores expectativas de inflación Powell va a continuar con el esquema emprendido por su antecesor en el cargo (Janet Yellen) de "normalización de la política monetaria". Ello implica elevar los tipos de interés de manera periódica, el mercado espera entre 6 y 8 subidas de tipos entre 2018 y 2019, hasta situarlos en el entorno del 3% dentro de dos años.
Pero también la "normalización de la política monetaria" implica adelgazar el balance de la entidad, que está en 4,5 billones (millones de millones) de dólares. El objetivo es bajar a 4 billones en 2018 y a la mitad en dos años. Finalmente indicó que "... el camino apropiado para la política monetaria [...] continuará buscando un equilibrio entre evitar una economía sobrecalentada y llevar la inflación de los precios de PCE (deflactor del PIB) al 2% de forma sostenida". Powell pone así el énfasis en un temor actual del mercado: que la economía se esté sobrecalentando. En concreto parece hacer referencia al temor de que la política fiscal de Donald Trump se está volviendo "más estimulante" de lo necesario y que ello obligue a la FED a subir más los tipos de interés.
Wall Street recibió el discurso de Powell con pérdidas cercanas al 0,5%, pero donde hubo más impacto fue en el mercado de deuda, con ventas de bonos que elevan la rentabilidad de los títulos a 10 años otra vez por encima del 2,9%, y en el de divisas con un fuerte repunte del dólar. Habrá que comprobar cual será el tono en su comparecencia de mañana para buscar la confirmación de este nuevo escenario.
El EUR vuelve a perder nuevamente los 1,23 USD/EUR aunque se mantiene dentro del rango objetivo estimado entre los 1,21-1,26. La reacción de los mercados bursátiles y de divisas a las palabras de ayer de Powell, reflejan una cierta sorpresa por su inesperado tono "hawkish"/halcón, cuando todos pronosticaban un presidente continuista y bajo la sombra, pero sobretodo y atento a las necesidades, de Trump.