El «circo» continua
El IBEX vuelve a la baja ante las incertidumbres en torno a la crisis en Cataluña. La activación del artículo 155 de la Constitución, tras la reunión del Consejo de Ministros del pasado sábado, deparó una caída del selectivo español ayer de un 0,60% (10.161 puntos) frente a unos mercados europeos que, como durante estos últimas semanas, han conseguido cerrar en positivo. Desde el 1 de octubre, inicio de los más crudo de esta crisis institucional, la distancia entre el IBEX y otros índices bursátiles se ha ampliado. Desde dicha fecha el IBEX ha perdido un 2,2% mientras que el resto de índices ha mejorado: DAX de Frankfurt (+1,3%), CAC-40 parisino (+1,0%), Nikkei de Tokio (+6,5%) o el Dow Jones neoyorkino (+4,1%). Por su parte, la prima de riesgo española se ha reducido hasta los 119 p.b. a pesar de la sensación generalizada de que la tensión en Cataluña tardará tiempo en solucionarse. La rentabilidad del bono español a 10 años se ha situado en el 1,65%.
Por otro lado, en Japón se celebraron el domingo las elecciones legislativas en las que el actual Primer Ministro, Shinzo Abe, ha revalidado su amplia mayoría. En sus primeras declaraciones, el Primer Ministro afirmó que aprovechará el amplio respaldo electoral recibido para emprender "medidas contundentes" frente a Corea del Norte y para ultimar sus reformas económicas. Aunque el Partido Liberal Demócrata (PLD) perdió algunos escaños, la coalición que conforma junto a Komeito logró revalidar su mayoría en la Cámara Baja del Parlamento nipón (son necesarios 310 diputados para controlar 2/3 de la Cámara). La alianza gobernante controlaba 322 diputados antes de la disolución del parlamento. Con el escrutinio casi finalizado y solo diez escaños por asignar, la coalición gobernante habría obtenido 312 escaños.
Por último, nos acercamos a la cita clave de este jueves, 26 de octubre, que viene sumamente cargada. Primero, por la reunión del BCE y la rueda de prensa de Draghi (nunca deja indiferentes a los mercados) posterior. Especialmente clave es esta reunión dado que en ella se puede empezar a plantear como reducir la velocidad de compra de deuda ("tapering") por parte de la entidad. Y en segundo lugar por el conflicto con Cataluña que alcanzará ese día un nuevo "punto álgido" con la más que posible DUI en el pleno del Parlamento catalán que se ha convocado para ese día. Ese día incluso podría venir trufado por la comparecencia (todavía no confirmada) de Puigdemont ante el Senado para argumentar su posición en el conflicto.
El nuevo presidente de la Reserva Federal.
Mucho se habla sobre la perspectiva de tipos de la Fed, pero probablemente se trata de un ejercicio muy atrevido si consideramos que las dos primeras cabezas de la institución se reemplazarán. El vicepresidente Standley Fischer dimitió con fecha efectiva el pasado 13 de octubre y Yanet Yellen no parece que vaya a ser revalidada en su cargo de presidente cuando finalice su mandato en febrero de 2018. Es más, actualmente en el consejo de gobierno del banco central de EE.UU. existen 3 vacantes y eso tras haberse completado una sustitución hace tan sólo unos días con la elección de Randal Quarles.
Trump ha iniciado una ronda de entrevistas con los potenciales candidatos y los mercados predictivos cruzan apuestas que van variando al son de los distintos comentarios y filtraciones. Por su parte los analistas confeccionan su propio baremo sobre el perfil alcista de tipos de cada candidato. De entre ellos, el que más preocupa es John Taylor, economista partidario de seguir una regla matemática para definir el tipo de interés y que según ésta actualmente el precio del dinero debería situarse en el 4,60% frente al 1,25% actual.
En todo caso parece afianzarse como principal candidato Jerome Powell que ya forma parte de la junta de gobierno y que sería interpretado como continuista (predictit le atribuye un 40% de probabilidades). Segundo en las quinielas sería Kervin Warsh (30% de probabilidades) que ya fue miembro de la Fed desde 2006 a 2011 y que, en el fragor de la crisis, advirtió erróneamente sobre los riesgos de inflación como consecuencia de la política monetaria de la Fed. Tuvo al menos la habilidad de no oponerse a las medidas de Bernanke si bien dejó caer sus recelos.
Dado el panel de candidatos y la dificultad de gestión de la política monetaria un candidato continuista sería lo idóneo, si bien eso no garantiza el éxito. Temblemos por el contrario si se avecina la aplicación de la regla de Taylor dado que avecinarían fuertes convulsiones en los mercados de bonos y a la bolsa.