Bruselas asegura que la compra de Popular por Santander no será obstáculo a la competencia
La CE responde así al eurodiputado socialista José Blanco Crece el número de posibles demandas contra Santander
La Comisión Europea afirma que se asegurará de que la compra de Banco Popular por parte de Santander “no genere un obstáculo significativo” para la competencia y que los clientes “sigan teniendo acceso a los servicios bancarios en condiciones competitivas”.
En respuesta a una pregunta escrita del eurodiputado socialista José Blanco, la Comisión señala que “evaluará el impacto de la operación” de compra de Popular por parte de Santander “en todos los mercados en los que ambas entidades están presentes, incluido el gallego”. El objetivo de la evaluación, indicó el organismo, “será asegurarse de que la operación no genere un obstáculo significativo para la competencia efectiva y de que las empresas y los particulares sigan teniendo acceso a los servicios bancarios en condiciones competitivas”. Sin embargo, agregó la Comisión, “la evaluación del impacto de la operación en el personal y en la Fundación de Banco Pastor no entra dentro de las competencias del control europeo de las concentraciones”.
En su pregunta, Blanco señaló que la resolución de Popular y su venta a Santander “tiene un impacto importante” en Galicia por la parte que toca a la actividad de Pastor. “Todo ello provocará que se produzca un importante aumento de la concentración bancaria y una reducción de la competencia, al tiempo que se producen importantes solapamientos entre Santander y Popular, con el riesgo que supone de reducción de las plantillas, además de la incertidumbre sobre la Fundación del Banco Pastor”, alertaba el eurodiputado.
Mientras, un grupo de unos 300 grandes inversores prevé demandar en la primera quincena de septiembre a Banco Santander, al que acusan de haberse enriquecido de forma ilícita con la resolución de Banco Popular, que la entidad que preside Ana Botín adquirió al precio de un euro. Se trata de unos 300 inversores cualificados cuyas reclamaciones superarían los 100 millones de euros, entre ellos dos aseguradoras y varias sicavs, a los que representa el bufete Jausas, que perdieron todo el valor de sus acciones de Popular, que tras la resolución del BCE, ordenada por la Junta Unica de Resolución (JUR), pasaron a valer cero.
No es la primera reclamación a la que tendrá que hacer frente Santander. Grandes fondos estadounidenses –entre ellos Pimco–, prevé demandar a la entidad, además de a la JUR.