El colectivo LGTBI+, los consumidores más sibaritas
Este grupo va más de un año por delante del resto de la población en cuanto a tendencias Muchas firmas aprovechan la celebración del Orgullo para sacar colecciones especiales
La comunidad LGTBI+ es un 40 % más sibarita que la población heterosexual. Es lo que se desprende del informe Consumo con Orgullo, que ha presentado Nielsen y que, además de sus preferencias por los productos gourmet, revela que este colectivo marca tendencia, lo que lo convierte en un sector muy atractivo para las empresas.
Una de las claves es que las personas LGTBI+ (lesbianas, gays, transexuales, bisexuales e intersexuales, además de otras orientaciones) no suelen tener hijos a su cargo, lo que no solo influye en el gasto, sino también en el ahorro. Las familias heterosexuales tienden a ahorrar por si surge algún imprevisto, mientras que las homosexuales lo hacen con fines más concretos, como un viaje.
El colectivo LGTBI+ supone un 10 % de la población española, del cual el 45 % se define como bisexual, un 19 % como lesbiana y un 17 % como gay, según el citado informe. Se trata de un grupo muy diverso, en el que también se encuentran diferencias notables. Las parejas gays, por ejemplo, tienen a su disposición dos sueldos de hombre, que tienden a ser más elevados, y por tanto, tienen más capacidad de gasto, mientras que las parejas de lesbianas se enfrentan a una doble penalización, ya que los dos salarios de la unidad familiar serán, por norma general, más bajos.
Las diferencias de gasto no residen solo en el poder adquisitivo sino también en las diferentes prioridades. Este colectivo, un 19%, prefiere los servicios premium y se decanta por marcas reconocidas más que la población heterosexual, pero elige opciones más baratas en otros casos. Por ejemplo, prefieren sistemas de transporte más económicos y respetuosos con el medioambiente. Según el informe de Nielsen, usan un 45 % más la bicicleta y un 40 % más las plataformas para compartir coche (BlaBlaCar, Amoven...) que los heterosexuales. Además, se inclinan por el alquiler antes que por la compra de una vivienda y suelen hacerlo en compañía.
El colectivo también es atractivo para las empresas por su capacidad para marcar tendencias y porque son un 16 % más innovadores. Entre los 40 y los 70 años tienen una destacada presencia en las redes sociales, un 37 % más que los heterosexuales en la misma franja de edad. Sin embargo, esto se invierte en el caso de los internautas más jóvenes. La citada consultora de consumo cree que este cambio puede deberse a un aumento de la confianza con la edad, que facilita mostrarse más abiertamente en público. Para su director en España y Portugal, Gustavo Nuñez, este colectivo podría tener más influencia para crear tendencias que los mileniales, a pesar de que se suelan centrar más esfuerzos en estos últimos.
Estas características hacen del consumidor LGTBI+ un cliente muy atractivo para las empresas. Algunas de estas han ido un paso más allá y han lanzado productos y colecciones especiales para sacar tajada de la celebración del Orgullo en todo el mundo. Por ejemplo, tanto Adidas como Converse, han diseñado una serie especial de zapatillas con los colores de la bandera gay. Por su parte, marcas de ropa como Levi’s y American Eagle también se han apuntado a la tendencia con colecciones específicamente creadas para la ocasión. Tener en cuenta al colectivo LGTBI+ resulta vital para las compañías, pues según el citado informe, tanto los integrantes de la comunidad como la población heterosexual aprecia que los distribuidores respeten estos valores a la hora de consumir.
Por eso, en estos últimos años, incluso las empresas más tradicionales se han ido sumando a las festividades del Orgullo. Este es el caso de la cadena de pastelerías Vait, que propone un postre arco iris de edición limitada y que solo podrá comprarse durante la semana del Orgullo, del 23 de junio al 2 de julio en Madrid, cuando la ciudad multiplique su población. Solo en la zona centro se prevé un incremento de hasta el 10%, más de medio millón de personas, desde los primeros días, cuando comiencen a celebrarse los primeros actos de este evento, festivo y reivindicativo a partes iguales. Será a medida que pasen los días cuando, según las previsiones de los organizadores, la gente irá llegando para acabar llenando la calle con más de dos millones de personas en el tradicional desfile, que en esta ocasión se celebrará el sábado 1 de julio.
A esto se añade que Madrid asume la capitalidad mundial del evento en esta edición, son un golpe de aire fresco para los comerciantes. La Confederación de Comercio de Madrid (COCEM) estima en más de 300 millones de euros los beneficios del World Gay Pride, ya que, de media, los casi dos millones y medio de turistas que acudan se dejarán en torno a 120 euros en compras. En opinión del consejero delegado de Diversity Consulting, David Martín, el evento reúne las condiciones necesarias para que el consumo se multiplique. Sabe de lo que habla. Esta consultora se dedica a asesorar a las empresas que quieren conectar con este colectivo tan diverso, y este momento es el idóneo. Si una persona LGTBI viaja con su familia se comportará y consumirá de una forma muy diferente a si acude a un acontecimiento de este tipo, alegre, festivo y reivindicativo, afirma este portavoz.