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Elecciones francesas

El Ibex se dispara un 3,7%, una cifra no vista desde octubre de 2015

BBVA y Santander lideran los ascensos con repuntes del 7,3% y 5,8%, respectivamente El Cac francés se anota un 4,1%, en su mayor subida desde agosto de 2012

La alegría regresa a los mercados.Después de una semana en la que las Bolsas registraron un comportamiento errático, los inversores se lanzaron ayer a las compras. El resultado de las elecciones en Francia fue el responsable de esta euforia. A pesar de que el próximo 7 de mayo la candidata de ultraderecha, Marine Le Pen, se enfrentará en las urnas al centrista, Emmanuel Macron, por hacerse con la presidencia de Francia, el mercado da por descontado la victoria del aspirante europeísta.Es decir, todo apunta a que se repetirá un movimiento similar al ocurrido en 2002 cuando Jean-Marie Le Pen perdió en segunda vuelta frente al candidato de centro derecha Jacques Chirac.

El resultado alcanzado en las elecciones del domingo se mantiene en línea con lo previsto por las encuestas, acabando así con los fracasos cosechados por los sondeos en las elecciones de EEUU y el triunfo del brexit. Los inversores celebraron ayer el nuevo varapalo sufrido por las fuerzas populistas, el segundo en lo que va de año.Esto llevó al Cac francés a subir un 4,14%, su mayor subida intradía desde el 3 de agosto de 2012. En los ascensos de ayer destacaron las entidades financieras. Credit Agricole sumó un 10,8%; Société Générale, un 9,8% y BNPParibas, un 7,5%.

Con el ascenso de ayer, el Cac regresa a máximos de abril de 2015. “Las encuestas para la segunda vuelta electoral apuntan a que Macron obtendrá más del 60% de los votos, frente a menos de 40% que conceden a Le Pen”, afirma Tim Stevenson, director de renta variable europea de Henderson Global Investors.

Los analistas de Barclays, aunque se muestran optimistas, señalan que el proceso aún no ha terminado, pero ven probable en el corto plazo los inversores “empiecen a pensar en las valoraciones atractivas que ofrecen las Bolsas europeas”. A las subidas registradas ayer por la Bolsa francesa se sumaron el resto de índices europeos.El Ibex 35, que consiguió mantener todos los valores en positivo, se anotó ayer un 3,76%.Con esta subida, la mayor desde octubre de 2015, el selectivo español conquistó una nueva cota los 10.700 puntos, niveles que no registraba desde agosto de 2015, antes de que las dudas sobre el crecimiento de China hiciera tambalear a los mercados.

A la cabeza de estos ascensos se situaron las firmas del sector bancario, con BBVA (7,3%) y Santander (5,82%) como principales representantes, acompañadas de cotizadas como Indra (5,71%) y Gas Natural (5,15%). El resto de índices europeos se sumaron a la fiesta.ElDax alemán se anotó un 3,37%; elMib italiano, un 4,7% mientras el Euro Stoxx y el FTSE subieron un 3,9% y un 2,1%, respectivamente.

Los principales mercados europeos en la sesión de ayer
Alejandro Meraviglia

Las subidas del ViejoContinente tuvieron su réplica en EE UU donde los tres índices de Wall Street tampoco permanecieron al margen de la euforia que recorrió a la renta variable y al cierre de las Bolsas europeas se anotaban un ascensos cercanos al 1%. Estos avances estuvieron alentados por el mensaje de Donald Trump, que a lo largo del fin de semana señaló que el miércoles desvelará la ansiada reforma fiscal con la que viene especulando el mercado desde su victoria en noviembre.

El analistas de Henderson indica que estos ascensos dejan entrever que una vez se celebren las elecciones alemanas –el 24 de septiembre–, “la prima de riesgo político [término acuñado por Citi] disminuirá”. A partir de entonces Stevenson espera que los inversores dirijan su mirada a la mejora de las economías europeas y de los beneficios empresariales, que empiezan a crecer después de seis años. A esto el experto añade el atractivo que representa la renta variable europea que cotiza con descuento respecto a la estadounidense.

El entusiasmo de Tim Stevenson contrasta con la visión de Lombard Odier que en su informe de estrategia de inversión sostiene que la descontada victoria de Macron no será ni el final de las tendencias euroescépticas. El departamento de análisis de la firma cree que tampoco garantiza “un Gobierno estable y funcional en Francia, dada la incertidumbre que rodea a las elecciones parlamentarias”.

El panorama político que deja tras de sí el resultado de los comicios pone de manifiesto el descontento de los votantes franceses con los partidos tradicionales.El partido republicano se hizo con el 19,7% de los votos y mucho más lejos quedaron los socialistas (6,1), por detrás del líder de ultraizquierda Jean-Luc Melenchon (19%).

El resultado de la primera vuelta de las elecciones presidenciales francesas se dejó sentir en el resto de activos. La rentabilidad de la deuda alemana a diez años subió al 0,33% desde el 0,25% del viernes.Por contra, el bono español con vencimiento en 2027 y el galo al mismo plazo se tomaron un respiro y cerraron en el 1,6% y 0,76% respectivamente.Estos movimientos permitieron a las primas de riesgo de ambos países perder posiciones.La española bajó desde los 142 puntos básicos que registró la sesión previa a los comicios a los 129 de ayer. La francesa cayó de los 60 puntos que marco el viernes a los 40 puntos básicos de ayer al cierre.Lejos quedan ya los 84 puntos básicos a los que subió en febrero cuando las encuestas otorgaban una amplia victoria a Le Pen.

El entusiasmo de Tim Stevenson contrasta con la visión de Lombard Odier que en su informe de estrategia de inversión sostiene que la descontada victoria de Macron no será ni el final de las tendencias euroescépticas. El departamento de análisis de la firma cree que tampoco garantiza “un gobierno estable y funcional en Francia, dada la incertidumbre que rodea a las elecciones parlamentarias”.

El panorama político que deja tras de sí el resultado de los comicios pone de manifiesto el descontento de los votantes franceses con los partidos tradicionales.El partido republicano se hizo con el 19,7% de los votos y mucho más lejos quedaron los socialistas (6,1), por detrás del líder de ultraizquierda Jean-Luc Melenchon (19%).

El resultado de la primera vuelta de las elecciones presidenciales francesas se dejó sentir en el resto de activos. La rentabilidad de la deuda alemana a diez años subió al 0,33% desde el 0,25% del viernes.Por contra, el bono español con vencimiento en 2027 y el galo al mismo plazo se tomaron un respiro y cerraron en el 1,6% y 0,76% respectivamente.Estos movimientos permitieron a las primas de riesgo de ambos países perder posiciones.La española bajó desde los 142 puntos básicos que registró la sesión previa a los comicios a los 129 de hoy. La francesa cayó de los 60 puntos que marco el viernes a los 40 puntos básicos de hoy al cierre.Lejos quedan ya los 84 puntos básicos a los que subió en febrero cuando las encuestas otorgaban una amplia victoria a Le Pen.

 

 

El euro, en máximos de cinco meses y medio

 

 

Uno de los activos más sensibles al devenir de la política europea es el euro, que desde primera hora de la mañana celebró el resultado con ascensos. Al cierre de las Bolsas europeas, la moneda única subía un 1,12% en su intercambio con el dólar y se cambiaba a 1,089 billetes verdes, máximos de cinco meses y medio.No obstante, a lo largo de la jornada el euro llegó a situarse por encima de los 1,09 dólares, algo que no sucede desde la victoria de Donald Trump. El ascenso experimentado ayer por la divisa europea demuestra la confianza que los inversores tienen depositadas en Macron. De hecho, los analistas de Goldman Sachs fijan como precio objetivo los 1,13 dólares. Es decir, descartan el programa rupturista de Marine Le Pen.La candidata ultraderechista incluye entre sus promesas electorales abandonar el euro, algo que los analistas han bautizado con el nombre del frexit.

 

 

El oro frena su asalto a los 1.300 dólares

 

 

Todavía no se han despejado todas las incógnitas sobre quién será el próximo presidente de Francia, pero los inversores parecen tenerlo más claro. Aunque la candidata de extrema derecha, Marine Le Pen, se disputará el cargo con el centrista Emmanuel Macron el próximo 7 mayo, el mercado empieza a dar por descontado la victoria del segundo. Esto sirvió ayer de alivio para el oro, que aparcó la tendencia alcista de las últimas semanas, y cedió un más un 1%, hasta los 1.270 dólares. A pesar de este descenso, el metal precioso continúa en zona de máximos de noviembre de 2016, coincidiendo con la victoria de Donald Trump. “Los inversores pueden confiar en que en la segunda vuelta se imponga el candidato preferido de la UE, Macron”, señalan los expertos de Julius Baer, que fija el precio objetivo a tres meses del oro en los 1.200 dólares por onza. Hace unas semanas el analista de la firma Carsten Menke defendía que el metal amarillo no cotizaría a la baja hasta que no se disipasen las dudas sobre el resultado de estos comicios. Pero en la evolución del oro no solo influyen las elecciones francesas. Los inversores seguirán pendientes de las tensiones geopolíticas en Siria yCorea delNorte y al menor atisbo de amenaza se cobijarán en valores refugios como este activo.

 

 

El Brent cae de los 52 dólares

 

 

La volatilidad en la que está sumido el Brent es de esperar que continúe hasta el 25 de mayo, día en el que los miembros de la OPEP y otros productores se reúnen para estudiar la posible prórroga del pacto al que llegaron a finales de 2016.Ayer el Brent retomó las caídas y cedió un 0,6%, hasta los 51,6 dólares.

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