Menéndez: “La Agencia Tributaria no es el monstruo de las galletas”
"El impuesto sobre sociedades deberías ser más sencillo", dice el director de la Agencia Tributaria
"El impuesto sobre sociedades debería ser más sencillo”. Así se expresó hoy el director general de la Agencia Tributaria, Santiago Menéndez, en un foro de fiscalidad organizado por PwC y la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD). Las palabras de Menéndez se producen cuando aún es latente el malestar de las empresas por el real decreto del pasado mes de diciembre que elevó la factura fiscal del impuesto sobre sociedades y desbarató sus previsiones de cierre del año.
“Los últimos meses del año fueron dramáticos”, resumió Javier Baulenas, director de Fiscalidad de Seat/Volkswagen, quien criticó la opacidad y la precipitación con la que actuó Hacienda en el real decreto de medidas fiscales que restringió aún más la compensación de bases imponibles negativas y exigió que se imputase en la base imponible los deterioros de cartera deducidos en el pasado.
“El impuesto sobre sociedades debería ser más sencillo y más previsible en su recaudación (...) También la Agencia Tributaria y Hacienda quieren tener un marco estable, aunque a veces parezca lo contrario”, señaló Menéndez. Ante un auditorio formado por directivos, el director de la Agencia Tributaria mostró su aprecio por los emprendedores y lamentó que a veces se sitúe a Hacienda y empresas como adversarios. “No somos el monstruo de las galletas que se lo come todo”, señaló Menéndez. Durante su intervención, puso en valor el proyecto SII (Suministro Inmediato de Información) que obligará a las empresas a informar en tiempo casi real de las facturas recibidas y emitidas. En este sentido, señaló que el SII representa “el futuro de la relación entre los contribuyentes y la Agencia Tributaria”. El nuevo sistema ha contabilizado un total de 757.281 registros de factura (635.166 emitidas y 122.155 recibidas) en los tres primeros meses desde la puesta en marcha de su programa piloto. Menéndez señaló que la Agencia Tributaria pone en marcha este proyecto con la intención de “dar asistencia” y sin la idea de sancionar a las empresas.
Aun así, las compañías mostraron su recelo ante la premura con la que el Gobierno pretende aplicar el sistema SII, un proyecto que quedó paralizado durante el paréntesis electoral. El Gobierno anunció que retomaba el pasado diciembre y estableció la entrada en vigor para julio. Las empresas entienden que lo más razonable hubiera sido esperar al 1 de enero de 2018. La Administración reitera que no existe ninguna posibilidad de retrasar la entrada en vigor.
Aun así, las mayores críticas de la jornada fiscal fueron para el real decreto de diciembre que modificó el impuesto sobre sociedades. La directora de asesoría fiscal de Banco Santander, Carmen Alonso señaló que “el mes de diciembre no está para muchas sorpresas”. Lamentó que las medidas adoptadas a final del ejercicio anterior tuvieron un efecto contable muy relevante. “Hubiera sido deseable una mayor previsión y trabajar en fórmulas para conseguir el mismo objetivo [de reducción del déficit] sin generar ese impacto sobre los grupos internacionales y cotizados”, señaló.
A vueltas con el tipo efectivo
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha denunciado en diversas ocasiones y en sede parlamentaria que las grandes empresas aplican un tipo efectivo muy bajo. El pasado enero señaló que las grandes empresas pagan por Sociedades el equivalente al 7% de sus beneficios, una cifra muy alejada del tipo nominal, que hoy se sitúa en el 25%. “Las grandes empresas pagan lo que es justo y es legal”, señaló Baulenas, de Seat. Carmen Alonso, de Santander, recordó que muchas empresas multinacionales obtienen sus beneficios en el exterior y tributan por ellos en el extranjero. Este es uno de los motivos que explica que el tipo efectivo sea tan bajo. De hecho, cuanto más internacionalizada esté una empresa y mayores beneficios logre en el exterior, menor será su tipo efectivo.