Toshiba escindirá su negocio de memorias flash el 31 de marzo
El objetivo de la compañía es encontrar financiación de terceros para compensar las pérdidas derivadas de su negocio nuclear en EE UU. La empresa nipona es líder en el mercado de las memorias flash.
Toshiba anunció hoy que escindirá su negocio de memorias flash y lo constituirá como nueva compañía el próximo 31 de marzo con el objetivo de encontrar financiación de terceros para compensar las pérdidas derivadas de su negocio nuclear en EE UU.
Con esta medida, Toshiba “está considerando una inyección de capital de terceros como medida financiera” ante la necesidad de mejorar su estructura financiera para encarar una devaluación de sus activos de “varios miles de millones de dólares”, según anunció en un comunicado tras una reunión de su junta directiva.
“Aún no sabemos el volumen concreto de las pérdidas”, señaló en rueda de prensa el presidente de la empresa, Satoshi Tsunakawa, quien añadió que este dato se incluirá en los resultados financieros que Toshiba publicará el día 14 de febrero.
La tecnológica nipona, que todavía no ha determinado el nombre de la entidad resultante de la escisión, indicó que la cantidad de activos que transferirá todavía está por confirmar y que venderá menos del 20% de sus acciones para conservar una participación mayoritaria en la nueva compañía.
El responsable de la empresa admitió que la escisión supone “un paso atrás” para Toshiba al tratarse de una rama con gran peso dentro de sus actividades, y añadió que la prioridad es “recuperarse” económicamente.
El mercado tokiota reaccionó de forma inmediata al anuncio de la empresa, y pese a haberse movido en el terreno negativo casi toda la mañana en la Bolsa de Tokio, en la primera media hora del segundo tramo las acciones de Toshiba llegaron a subir un 4,45%.
El pasado 18 de enero Toshiba afirmó que estudiaba la escisión después de que los medios locales afirmasen que la tecnológica habría iniciado negociaciones con la empresa estadounidense de almacenamiento Western Digital para la venta de una parte.
Las memorias de tipo NAND de Toshiba, utilizadas en dispositivos como teléfonos inteligentes, ostentan una cuota líder en el mercado global y sólo dicha unidad logró unas facturación de 845.600 millones de yenes (6.893 millones de euros) en 2015.
El gigante tecnológico japonés, que apenas estaba levantado cabeza tras destaparse un escándalo de manipulación contable orquestado por su antigua directiva, informó el pasado diciembre que podría sufrir un deterioro multimillonario de activos relacionado con la compra de CB&I Stone & Webster.
Toshiba mantiene un contencioso con Chicago Bridge & Iron, de quien adquirió esta empresa en diciembre de 2015, a cuenta de sus tasaciones de los activos y negocios de la compañía.
La corporación japonesa dijo que la cifra podría ascender a “varios miles de millones de dólares” y que la valoración final dependerá de la revisión contable que la empresa completará en el primer trimestre de 2017