Teka traslada su sede comercial en Madrid a la antigua torre de BBVA
El grupo de origen alemán ha trasladado la sede de su sede comercial al edificio Castellana 81
El grupo de origen alemán Teka ha trasladado la sede de su unidad de negocio de cocina y baño al edificio Castellana 81, conocido por albergar la antigua sede de BBVA en Madrid y que ha sido objeto de una profunda rehabilitación.
Desde el día 2 de enero, las nuevas oficinas han comenzado a acoger a las 50 personas que trabajarán allí, según la empresa, tanto de las áreas de Teka Holding como en la división de cocina y baño. Las nuevas oficinas están situadas en la planta 23 del edificio.
Las consultoras CBRE y Aguirre Newman han sido seleccionadas por la socimi GMP –controlada por la familia Montoro– para buscar inquilinos. Desde la empresa propietaria se explica que ya se ha alquilado el 25% del espacio libre y “hay diversas operaciones que se están estudiando”.
Teka se convierte así en una de las primeras compañías en ocupar este edificio después de la rehabilitación iniciada a finales del año 2015, prácticamente concluida, y que ha sido llevada a cabo por OHL.
Además de Teka, la firma Hays, especializada en la búsqueda de empleo y selección de personal, cerró el pasado mes de septiembre un acuerdo de alquiler para trasladar este mes de enero sus oficinas de Madrid a este emblemático edificio, situado en el corazón financiero de Azca.
El traslado de Teka se hará de forma progresiva durante el mes de enero, según ha señalado la compañía, cuyo personal comercial estaba ubicado en el edificio colindante de Castellana 93 (propiedad de Merlin Properties), además de parte de la plantilla situada en Alcalá de Henares, donde cuenta con su centro logístico. Esta empresa, presente en España desde la década de los sesenta, tiene su sede central en Suiza.
El inmueble, propiedad del grupo inmobiliario GMP, albergó la sede del banco en Madrid hasta que la entidad financiera se trasladó a Las Tablas. GMP, que compró al banco el edificio en 2007, comenzó en 2015 la reforma de la torre, a la que los propietarios rebautizaron como Castellana 81. La inmobiliaria habrá invertido alrededor de 30 millones de euros en la reforma.
Este rascacielos fue diseñada por el arquitecto Francisco Javier Sáenz de Oiza y comenzó su construcción a partir de 1978. La torre tiene 107 metros de altura, distribuidas en 28 plantas de oficinas, y 38.000 metros de superficie. BBVA permanece ahora solo en una pequeña parte, en las plantas superiores, ocupando 6.000 metros para despachos, un área que de momento no será reformada. Castellana 81 es una referencia arquitectónica de la ciudad de Madrid y cuenta con la clasificación de bien protegido.