El nuevo jefe de la CNMV impulsará Madrid como City alternativa
Santiago Albella cree que el brexit constituye una oportunidad para el mercado español
La puesta de largo del nuevo presidente de la CNMV ha habido lleno casi total en la sede del supervisor. Directivos de empresas, de intermediarios, de BME, de la asociación de instituciones de inversión colectiva, incluso antiguos presidentes del regulador, como Manuel Conthe o Juan Fernández-Armesto han estado presentes.
Sebastián Albella, buen conocedor de los mercados e impulso de la Ley del Mercado de Valores de 1988 que creó la CNMV, se ha estrenado con un discurso en el que ha propuesto como principal objetivo que el organismo que preside desde hace unos días sea el guardián de "la limpieza y transparencia del mercado y de la tutela de los intereses de los inversores”.
Albella, procedente del despacho Linklaters, donde llegó en 2005 procedente de Ramón y Cajal Abogados, firma de la que fue cofundador, también ha mencionado la función de la CNMV como regulador. A través de las circulares, que requieren, eso sí, de una norma superior para su lanzamiento, y las directrices de ESMA, Albella se ha propuesto que la CNMV contribuya a la "eficiencia y dinamismo del mercado”.
Es más, mencionó al brexit como una oportunidad para el mercado español y dejó entrever que el objetivo es convertir la salida de Reino Unido de la Unión Europea en una oportunidad para el mercado español. Ya hay entidades financieras que están moviéndose para salir de la City si se consuma el brexit con todas sus consecuencias.
El ministro de Economía, Luis de Guindos, se ha comprometido en la toma de posesión de Sebastián Albella como presidente y de Ana María Martínez Pina como vicepresidenta a poner a disposición del supervisor de los mercados los recursos necesarios. Ha asegurado que la CNMV recibirá “todo el apoyo y todo lo que necesite” para lograr que Madrid se convierta en una de las principales plazas financieras europeas aprovechando el brexit.
Elvira Rodríguez y Lourdes CentenoLa expresidenta de la CNMV, Elvira Rodríguez, y la exvicepresidenta, Lourdes Centeno, también han estado en la toma de posesión, y en el acto Rodríguez ha reivindicado su trabajo durante cuatro años –entró en el supervisor en 2012–, al asegurar durante su mandato el organismo ha afrontado con éxito numerosos retos.
En la etapa de Elvira Rodríguez, la CNMV tuvo que lidiar con varios escándalos, como el reflujo de la venta masiva de participaciones preferentes en 2009, los casos de Pescanova y Abengoa y los problemas en la liquidación de Banco Madrid, que pusieron en jaque el estatus de los fondos de inversión.
