Los usuarios eléctricos deben 525 millones a la renovables
Las plantas recuperarán esta cantidad, provocada por un error de cálculo del Ministerio de Industria, a lo largo de su vida útil
El nuevo mecanismo de remuneración de las energías renovables que el Gobierno aprobó en julio de 2013 y que ha supuesto un recorte para este sector de más de 4.000 millones en tres años, se basa en una serie de parámetros con los que fijar la retribución de la inversión y los costes de operación a lo largo de la vida regulatoria de la instalación.
Entre los polémicos parámetros, que sustituyeron a las antiguas primas a la producción, figura una estimación a tres años del precio de venta de la energía que las empresas cobrarían en el mercado: si el precio real se situaba por debajo de unos límites preestablecidos, la diferencia debía compensarse para garantizar la rentabilidad razonable reconocida por ley (7,39%). Y viceversa.
A punto de terminar el primer semiperiodo regulatorio que fija la normativa (los citados tres años), el precio que han cobrado las empresas en el mercado ha resultado muy inferior al estimado por el Ministerio de Industria. Este error de previsión (intencionada, según las mala lenguas)ha supuesto una merma de ingresos de 525 millones de euros, en su mayoría, de la eólica, que el sistema eléctrico les debe compensar a partir de 2017. Y es que el pago no se realiza al año siguiente, sino a lo largo de la vida incentivada de las plantas (20 años).
Según cálculos del sector, el precio medio del mercado en 2014 (año de la desviación)se situó en 42,06 euros/ MWh, muy por debajo del primer límite inferior, 44,21 euros/MWh, por lo que a las instalaciones se les tendrá que devolver la diferencia entre el primer límite inferior y el precio medio del mercado.
A falta de que la CNMC publique el precio medio oficial del mercado para 2016 (el de los últimos 12 meses desde octubre del año pasado), los cálculos apuntan a 38,4 Euros MWh, por debajo de los dos límites inferiores de este año (45,7 y 41,75 euros/MWh), por lo que el sistema deberá compensar unos 525 millones de euros a futuro. El organismo tiene de plazo hasta esta semana para publicar los datos. La desviación la pagarán los consumidores en los peajes eléctricos a partir del próximo año.
La situación ha hecho saltar las alarmas. Recientemente, la Asociación Empresarial Eólica (AEE) denunciaba la desviación de los precios estimados por el Ministerio de Industria en los tres años del primer semiperiodo (6,37 euros/MWh a la baja), “por tratarse de años de elevados vientos y lluvias y precios de los combustibles fósiles bajos”. La AEE calcula una merma de ingresos de 630 millones, de los que solo serán compensados al sector y en muchos años el 36% (unos 230 millones) porque “los límites se han diseñados de tal modo que resulta improbable que la compensación sea por el total”. En otras palabras, “un error en el diseño” que impedirá a las empresas alcanzar la rentabilidad que supuestamente le garantiza la ley.
Esta pérdida afecta a los parques con derecho a retribución, en tanto los 6.300 MW (304 parques) que no tienen derecho a incentivo porque la regulación se lo retiró de manera retroactiva han sufrido una merma en los ingresos del mercado previstos de 235 millones de euros en tres años que no pueden recuperar.
El problema se agrava a partir de 2020
Para el segundo semiperiodo regulatorio del incentivo a las las energías renovables (de 2017 a 2019), el Ministerio de Industria ha cambiado el sistema de estimación del precio de mercado y en dicho periodo tendrá en cuenta las cotizaciones (media aritmética) de los contratos de futuros anuales negociados en el mercado de futuros de electricidad de OMIP durante los seis meses anteriores al inicio del semiperiodo. Según los datos más recientes (de marzo a septiembre), los precios se sitúan en 42,06, 41,64 y 41,80 euros MWh para cada uno de los tres años, respectivamente.
El problema se plantea a largo plazo. Según la Asociación Empresarial Eólica (AEE), desde el tercer año del segundo semiperiodo (año 2019), no hay referencias obligatorias, pero para 2020 sí existe la referencia de los futuros de OMIP, “la mejor estimación posible a día de hoy”. La asociación considera como más razonable “que el regulador se base en los precios actuales y atendiese a los pronósticos que indican que seguirán una senda bajista”.
En el caso contrario, añade la asociación, si apuesta por precios más altos, como ya hizo cuando dictó la norma, el incentivo será más bajo sin ninguna garantía de recuperación por la propia perversión del sistema. Según los cálculos de AEE, si se toman como referencia los 52 euros/MWh que ya figuran en la Ley del Sector Eléctrica, “en lugar de los 41 euros/MWh que sería razonable tomando la senda de los futuros, los parques eólicos dejarían de ingresar en los próximos tres años sin garantía de recuperarlos otros 600 millones de euros necesarios para alcanzar la rentabilidad razonable”.