La banca avisa sobre el retraso del crecimiento del crédito
Los banqueros esperan nuevos procesos de fusión, pero a medio plazo Santander y BBVA están atentos a oportunidades
Los bancos esperaban que este año por fin que comenzara a crecer ligeramente el crédito, pero parece que este aumento se retrasa hasta finales de 2017, según concluyeron ayer responsables de las principales entidades del país, que alertaron sobre esta ralentización, y sobre el crédito barato. Todos coinciden en que en a medio plazo se iniciará otro proceso de fusiones.
La mejora de la rentabilidad ante los bajos tipos de interés, la recuperación de la reputación y la digitalización del sector siguen siendo los retos de la banca española. Las fórmulas para su recuperación, las mismas también de siempre: reducción de costes, incluidas las fusiones, subir los ingresos por comisiones con el mayor cobro de servicios, e incrementar los diferenciales del crédito y vincular más al cliente. El economista jefe del Banco Central Europeo (BCE), Peter Praet, también incidió en esta falta de rentabilidad del sector bancario no solo en España, sino en Europa. Afirmó que los beneficios del sector continúan siendo “muy débiles”. Y si las bajas rentabilidades persisten a lo largo del tiempo esto podría llegar a convertirse “en un fenómeno sistémico”.
Pero fue el retraso en la recuperación del crédito donde los bancos pusieron más énfasis en sus argumentos en el VII Encuentro Financiero organizado por el diario Expansión y KPMG. Fue el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, quien alertó sobre el retraso en la recuperación del crédito. Gortázar aseguró que será “difícil” que al cierre de este año este indicador crezca. Su homólogo de Banco Sabadell, Jaime Guardiola, también indició en la ralentización de este crecimiento, y pese a reconocer que siempre hay un desfase entre la recuperación económica y la del crédito, en esta ocasión el proceso está siendo más lento.
El número dos de Bankia, José Sevilla, precisó que los bancos quieren prestar, pero sin embargo se registra una lenta evolución debido, sobre todo, al desapalancamiento de la economía.
Los tres banqueros también criticaron la conocida como guerra del crédito, practica de algunos bancos que ofrecen financiación a tipos muy bajos, que incluso pueden llevar a pérdidas. pidió ante ello una reflexión no solo en España, sino también en la UE. Mientras que Gortázar precisó que “hay que conseguir relaciones rentables a largo plazo”, pero “siendo conscientes de que los precios son adecuados”. La “tentación de desordenar la política de precios está ahí por el exceso de liquidez” que existe en el mercado, añadió.
El consejero delegado de Sabadell fue el más tajante en su declaración. Aseguró que la entidad está perdiendo cuota de mercado especialmente en préstamos corporativos “por no entrar en la guerra de precios”. Llegó a reclamar una subida de los diferenciales del crédito, aunque reconoció que no son capaces a causa de la dura competencia que vive el sector. Y recordó que en el mercado anglosajón la competencia por los diferenciales “son más racionales”, para añadir que en España la banca está “subvencionando los productos muy agresivos”.
El ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, aseguró que el nuevo crédito sigue creciendo a doble dígito, pero en menor medida que hace unos meses. La causa está, según Guindos, en que la demanda de crédito por parte de las pymes se está desacelerando. Este aspecto, declaró, tiene que ver “con las expectativas de tener un Gobierno estable y con una agenda de política correcta”.
Los responsables de España de Banco Santander y BBVA, Rami Aboukhair y Cristina de Parias, respectivamente, reconocieron que ven margen para nuevas fusiones en España, aunque las sitúan a medio plazo, con excepción de la de Bankia y BMN. Su opinión coincide con al del resto de sus colegas. Ambos directivos también reconocieron que sus respectivas entidades estudian oportunidades de compra, aunque sus planes, de momento, se basan en el crecimiento orgánico.
El presidente de la patronal bancaria española, AEB, José María Roldán, insistió en que las entidades tienen que ser rentables para sobrevivir y también ser capaces de remunerar adecuadamente a sus accionistas. Mientras que el gobernador del Banco de España, Luis María Linde, descarta un alza “significativa” de la exigencia de capital.
Sobre la continuidad de los bajos tipos de interés Praet aseguró que el BCE “preservará” su política acomodaticia hasta que la institución alcance el objetivo de inflación del 2%.