Juan José Hidalgo empieza a ceder el testigo de Globalia a su hijo
Nombra a Javier Hidalgo consejero delegado del holding turístico y ficha a Pedro Serrahima como director general
Revolución en el grupo turístico Globalia. Su presidente, Juan José Hidalgo, cede importantes cuotas de poder a su hijo, Javier Hidalgo, con su nombramiento como consejero delegado. El único descendiente varón de Hidalgo se desvinculó accionarialmente del holding familiar en 2013 con la venta de su paquete del 5% a Abel Matutes. Sus hermanas, María José y Cristina, se han mantenido en el capital y los tres han jugado distintos papeles durantes estos años en la dirección de Globalia y sus filiales.
El empresario Salmantino, fundador de enseñas como Air Europa y Halcón Viajes, inicia de este modo el proceso de sucesión a los 75 años de edad. Javier Hidalgo venía desempeñando las labores de director general, cargo que ocupará Pedro Serrahima, quien ha colaborado íntimamente con él desde la direción de Pepe Phone, recién vendida a MásMóvil por 158 millones.
El presidente y socio industrial lleva años tanteando la entrada de nuevos socios en el capital, así como la posible salida a Bolsa.
Fuentes del grupo descartan que la creación del puesto de consejero delegado suponga un relevo efectivo en la dirección del conglomerado turístico. De hecho, destacan como mayor novedad la incorporación de un directivo externo a la familia, aunque con vinvulación reciente con Globalia, como director general. "Se ha elegido a una persona neutral respecto a las distintas divisiones para llevar dirigir el día a día", explican.
Juan José Hidalgo mantiene una participación mayoritaria en Globalia, mientras que el resto del accionariado está en manos de Banco Popular, Unicaja, las hijas de Hidalgo, su mujer Avelina Gutiérrez, su hermano Juan Antonio, Abel Matutes y la Fundación Tatiana Pérez de Guzmán el Bueno. El presidente y socio industrial lleva años tanteando la entrada de nuevos socios en el capital, así como la posible salida a Bolsa.