Alfredo Cohen: “La inversión en España es una prioridad para Sambil”
Representa a la segunda generación de la familia Cohen, una de las familias más ricas de Venezuela gracias a la inmobiliaria fundada en 1958 En marzo abrirán su primer centro comercial, un outlet, en Madrid
La familia venezolana Cohen está preparada para abrir el Sambil Outlet en Madrid el próximo 24 de marzo. Alfredo Cohen (Caracas, 1961) presentó ayer a la prensa el rehabilitado centro comercial, tras meses de retrasos. Es el director general de Constructora Sambil, una inmobiliaria de control familiar fundada en 1958 por su padre, Salomon Cohen, de origen sefardí y que ha dado lugar a una de las grandes fortunas en Venezuela. Desde los años noventa, han triunfado con la apertura de varios centros comerciales en su país, República Dominicana y Curaçao. Es su primera inversión en España.
Pregunta. ¿Por qué Sambil apuesta por España?
respuesta. Hay mucha afinidad de América Latina con España gracias al idioma. También hemos visto que aquí gustan los centros comerciales. Este modelo está bien consolidado.
P. Más bien hay mucha tradición del comercio de proximidad de calle.
r. Hay un cambio de hábitos debido al trabajo, con menos tiempo, y estos centros permiten disfrutar de entretenimiento, ocio y compras en un mismo lugar.
P. ¿Cuál es el futuro del concepto del outlet en España?
“El Gobierno venezolano se apropió de un centro comercial nuestro. No nos han pagado”
r. Es un futuro excelente a nivel mundial. Es un concepto que ha calado desde EE UU. La gente busca buenos precios de ciertas marcas.
P. ¿Qué próximas inversiones prevén en España?
r. Una inversión como esta nos brinda la capacidad y nos da ánimos para seguir creciendo. No será la única inversión. Vendrán otras grandes ciudades donde llevaremos el concepto de outlet. No hemos cruzado 7.000 kilómetros para un solo centro comercial. Es un punto de partida, además del mejor lugar en el que entrar en Europa. España es nuestra prioridad aunque en el futuro vayamos a Italia, Francia o Reino Unido. También valoraremos otros negocios inmobiliarios, además de centros comerciales.
P. ¿Su inversión en España tiene que ver con la difícil situación económica y política de Venezuela?
r. Independientemente de la situación buena o mala de Venezuela, nosotros tenemos un producto de calidad, distinto. Tenemos un interés en salir al exterior con nuestro modelo de centros comerciales: en República Dominicana y Curaçao, ahora España, y en el futuro en Puerto Rico, Colombia y Panamá.
P. En Venezuela, el Gobierno le expropió un nuevo centro comercial. ¿Qué va a ocurrir con ese centro?
r. Ellos lo llaman expropiación, pero realmente es una apropiación, porque realmente todavía no nos han pagado. Está cerrado a la espera de que la propiedad sea devuelta a sus dueños originales, porque nunca se ha usado. No tengo una explicación ni razones. Es muy extraño. Se entiende que un Gobierno expropie una petrolera o una compañía eléctrica de interés público.
P. ¿Tienen esperanza de que se lo devuelvan?
r. Sí, claro. No tiene ninguna justificación esa apropiación. Allí hay 120 comerciantes que están esperando que yo les entregue su local y que confiaron en mí. Estamos todos esperando. El Gobierno no nos ha dado fechas, ni para bien ni para mal. Venezuela está pasando un momento difícil, de cambio. Se vio el año pasado, con la elección de la Asamblea Nacional, que casi el 70% de los asambleístas son de la oposición. Se ve que el cambio va a venir en Venezuela.
“Se ve que el cambio va a venir en Venezuela. Esperamos una salida democrática”
P. ¿Cuál es la salida al conflicto político y económico en el país?
r. Como personas que trabajamos en el sector privado esperamos que sea una salida democrática, en paz, sin que vayamos a una guerra civil. Tenemos la paciencia de esperar para que la salida sea electoral y que el perdedor lo asuma.
P. ¿Cómo afecta la situación a la inversión privada?
r. Está afectando muchísimo pero simultáneamente es un país de oportunidades, donde no se ha invertido en muchos años. Hace unos años, Colombia vivió una crisis terrible y ahora se ha convertido en el sitio más atractivo para la inversión extranjera en la región.
P. ¿Qué problemas se encuentran las empresas que se instalan allí?
r. El problema del dólar y el cambio de la moneda. En Venezuela hay dos tipos de cambio, el tipo real y el del mercado negro. Este tipo de controles traen inflación, escasez y colas. El empresario español no va a conseguir un cambio real, que se usa para comida e insumos básicos. Se puede comprar comida perfectamente en Venezuela, pero a precio de mercado negro. Las colas son para adquirir productos a precio regulado. Las tiendas de moda tienen otro problema, y es que el Gobierno quiere regular los precios para evitar la especulación.
El túnel del viento más grande de Europa
A principio de año, Sambil anunció que abrirían el nuevo outlet de Leganés, en el antiguo centro comercial Avenida M-40, en otoño. Ahora se retrasa la inauguración para el 24 de marzo.
“Dijimos que íbamos a abrir en otoño con más del 80% de ocupación de las tiendas. Pero estamos con el 73%. Se va a lograr en marzo. Ahora comienzan las obras en los espacios de las marcas. Hemos venido a quedarnos a medio y largo plazo. Las reticencias vinieron por los problemas de consumo y desempleo en España”, reconoce Alfredo Cohen.
El centro tendrá que superar la competencia de tres outlets en Madrid y de tres centros comerciales en las proximidades. Aspira a atraer cinco millones de visitantes en el primer año. Como ventajas, señalan la apertura de una estación de metro, el supermercado Simply (que sustituye a Eroski) y la presencia ya confirmada de los outlets de El Corte Inglés, Inditex, Cortefiel o Mango. Pero el punto fuerte de la marca Sambil también es el ocio, que en este caso tendrá como atractivo el que Cohen señala como el mayor túnel del viento de Europa, además de 12 salas de cine. Espera también que la remodelada zona de restauración, con terrazas exteriores, lleve nuevos clientes. De hecho, ya está contratado el 100% de esos locales con enseñas como Burger King, Vips, Foster’s Hollywood o KFC.
La empresa compró en 2012 el centro Avenida M-40 por 22 millones, invierte entre 55 y 60 millones en la reforma y espera que las marcas que allí se instalen destinen otros 25 o 30 millones.