_
_
_
_
_
Breakingviews
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Combustible para la economía española

El país necesita encontrar un camino para reducir el déficit al 3,1% para 2017

El presidente en funciones, Mariano Rajoy, durante la votación de investidura del miércoles.
El presidente en funciones, Mariano Rajoy, durante la votación de investidura del miércoles. REUTERS (REUTERS)

La economía sin rumbo de España se quedará pronto sin combustible. Va demasiado bien tras ocho meses sin Gobierno, pero es poco probable que pueda continuar así el año que viene.

El presidente en funciones Mariano Rajoy perdió el voto de confianza el miércoles. El PP es la mayor fuerza, pero necesita el apoyo de otras formaciones, incluido el de los socialistas, para formar Gobierno. A no ser que lo logren en los próximos dos meses –quizás después de las autonómicas de finales de mes–, los españoles tendrán que afrontar unos terceros comicios en diciembre.

Mientras tanto, la economía española navega bien. Creció un 0,8% en el segundo trimestre, el doble que otros miembros de la UE y por encima de lo esperado, y probablemente supere el 3% este año. Los bajos tipos de interés son un fuerte viento de cola para su endeudado sector público y privado, mientras que la creación de empleo impulsa la renta disponible.

El saneamiento de los bancos públicos en 2012 ha ayudado también a desbloquear los prestamos a familias y pequeños negocios. Su sector turístico se ha beneficiado de los conflictos en Turquía y otros países mediterráneos, mientras que las exportaciones se mantienen fuertes. En comparación con Francia e Italia, los problemas de España parecen pequeños. El riesgo de un gobierno populista ha disminuido. El interés del bono español a 10 años está por debajo que el italiano.

La ausencia de piloto puede hacer que inversores y políticos subestimen cuánto pueden empeorar las cosas. La incertidumbre política podría reducir el PIB en torno al 1% entre este año y el siguiente, según los analistas de BBVA. España necesita encontrar un camino para reducir su déficit presupuestario al 3,1% en 2017, lo que significa que es necesario tomar decisiones difíciles, algo que un Gobierno débil o inexistente no puede lograr de forma sencilla.

La recuperación de España ha sido notable, pero las políticas disfuncionales podrían empezar a hacer mella. Seas cuales sean las ventajas de los coches autónomos, a veces no se puede sustituir una mano firme al volante.

Archivado En

_
_