Sacyr pierde un pleito por el canal de Panamá por 90 millones
La Junta de Resolución de Conflictos (DAB) rechazó un reclamo interpuesto por el principal contratista de la ampliación del canal de Panamá de 98,98 millones de dólares (unos 88 millones de euros) por el supuesto mal estado del basalto en la zona pacífica de la vía acuática, informó hoy esta entidad.
Grupos Unidos por el Canal (GUPC), liderado por la española Sacyr, denunció durante las obras “condiciones físicas adversas e imprevisibles” en la vertiente pacífica, en especial, el supuesto mal estado del basalto, que la segunda estancia de solución de diferencias declinó reconocer en una resolución emitida el pasado 26 de julio, recordó la institución en un comunicado.
En octubre de 2013, la primera instancia de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) “rechazó dicho reclamo al determinar que las supuestas condiciones encontradas eran previsibles”, apuntó la administradora de la ruta.
Estos 98,98 millones de dólares forman parte de los más de 3.500 millones de dólares que GUPC le reclama al canal por supuestos sobrecostes.
La ampliación del canal de Panamá, que ha tardado casi diez años en construirse y permite el paso de buques con capacidad para transportar hasta 12.000 contenedores, se inauguró el pasado 26 de junio con una gran ceremonia a la que acudieron varios jefes de Estadio y de Gobierno de países del mundo.
GUPC, que también está integrado por la italiana Salini-Impregilo, la belga Jan De Nul y la panameña Constructora Urbana, SA (CUSA), ganó por 3.119 millones de dólares el diseño y la construcción del tercer juego de esclusas, el principal proyecto de la ampliación.
La Junta de Resolución de Conflictos es la segunda estancia creada para resolver las disputas entre la ACP y los contratistas.
En caso de que una de las partes esté insatisfecha de la decisión del DAB, esta podrá elevar la reclamación a un tribunal arbitral superior, organizado bajo el reglamento de la Cámara de Comercio Internacional y cuya decisión será final, recordó la ACP.