Los inversores buscan refugio: los tipos de la deuda más segura se van a mínimos
El aparente optimismo de hace unos días se ha borrado de un plumazo y los inversores huyen hacia los activos considerados refugio
Cambia de nuevo el sentimiento de los inversores. El aparente optimismo que durante unos días permitió a las Bolsas recuperar parte de lo perdido tras el shock que supuso el brexit se ha borrado de un plumazo y vuelve a imponerse la aversión al riesgo. Así, la huida hacia activos refugio ha provocado por un lado un notable repunte del oro, que marca máximos desde marzo de 2014 en los 1.370 dólares la onza y podría alcanzar de forma inminente la cota de 1.400 de continuar esta tendencia, según los analistas. Pero también sube con fuerza la demanda de los bonos considerados más seguros: los alemanes, los japoneses, los estadounidenses y los suizos, profundizando muchas de sus rentabilidades en tasas negativas.
Tal y como venían advirtiendo los analistas, la estabilidad que reinaba en la renta variable no se correspondía con la situación creada tras el resultado del referéndum británico y los mercados estaban en la cuerda floja, lo que en cualquier momento daría paso de nuevo al nerviosismo. Los expertos aseguran que se mantienen las incertidumbres en torno al brexit y ha aumentado la presión sobre el sector bancario, con la banca italiana al borde del rescate.
Así, en este contexto, el rendimiento del bono alemán a diez años (bund), que a mediados del pasado mes de junio entró por primera vez en negativo, registra un nuevo mínimo histórico en el -0,194%. Aunque la principal razón de que el tipo de bund haya caído hasta cotas ya cercanas al -0,2% es el programa de quantitative easing del BCE, el rebrote del miedo entre los inversores contribuye a ahondar en las tasas negativas.
Al mismo tiempo, el bono japonés a 20 años reduce su rentabilidad por debajo del cero (-0,26%) por primera vez en su historia. Asimismo, Suiza se convertía ayer en el primer país en donde todos los tipos de su curva se encuentran en negativo. Y en Estados Unidos, los inversores buscan una red de seguridad en la deuda pública estadounidense, llevando la rentabilidad de los bonos a diez años a mínimos históricos. El interés del treasury a diez años recorta hasta ele 1,36%.
El dólar también se beneficia de ese efecto y sube frente al euro y el yen, mientras la libra esterlina bajaba por debajo de los 1,31 dólares por primera vez desde 1985.
De acuerdo con Link Securities, es el potencial impacto negativo del Brexit el principal factor que ha hecho girar el sentimiento de los inversores de forma tan brusca. “El mercado recibió mal la decisión del Banco de Inglaterra (BoE) de permitir a los bancos que actúan en el Reino Unido liberar capital para incrementar su capacidad de dar créditos al sistema. También alarmó a los inversores el hecho de que en los últimos días tres grandes fondos inmobiliarios británicos suspendieran los reembolsos ante la avalancha de peticiones por parte de los partícipes”, explica la firma de análisis.