ACS se refuerza en Japón con obras en el potente campo de renovables
Construirá dos plantas fotovoltaicas y negocia otros dos proyectos
El grupo ACS se está haciendo fuerte en un mercado poco frecuentado por la construcción española como es el japonés, de fuerte interés por el empeño del país en incrementar el peso de las renovables en su mix energético y por el notable consumo de energía de su población y empresas.
La compañía que preside Florentino Pérez se ha impuesto, a través de la filial Maetel Construction Japan, en dos procesos para la construcción de sendas plantas fotovoltaicas. X-Elyo, en cuyo capital se ha producido la entrada del fondo KKR, ha confiado a ACS el proyecto llave en mano (desde el diseño y construcción hasta la operación y mantenimiento) para la ejecución de un parque fotovoltaico en la localidad de Hayato.
El segundo encargo es el de la fotovoltaica de Kokota, que se convierte a su vez en el segundo pedido del fondo de inversión Maiora al conglomerado español, que está a punto de finalizar para este cliente el parque solar de Takahagi, de 12,5 MW.
Un mercado gigante en energía solar
La tragedia nuclear de Fuckushima, en 2011, marcó un punto de inflexión a favor de la apuesta de Japón por las energías renovables. El país se encuentra entre los cinco mayores consumidores de energía del mundo y avanza en su plan para aumentar el peso de tecnologías como la fotovoltaica en su mix energético, donde ya es la tercera referencia mundial por potencia instalada. Los parques nacen con contratos a largo plazo de suministro.
Los gigantes a batir son grupos como Mitsubishi o Kyocera, esta última desarollando ya plantas solares flotantes.
Con ambas adjudicaciones, ACS eleva su cartera de obras en el mercado nipón hasta el entorno de los 170 millones de euros. Y a la vuelta de la esquina parecen venir nuevos contratos. Fuentes solventes aseguran que la misma Maetel Construction tiene negociaciones avanzadas para la firma de otros dos proyectos industriales en el país con un presupuesto conjunto ligeramente ingerior a los 100 millones de euros.
Precisamente, la subsidiaria Maetel participa ya en el diseño y construcción de otro parque solar de 47 MW (183.400 módulos fotovoltaicos de 260 W) y sobre una superficie de 85 hectáreas, bautizado como Mashiki, que también operará y mantendrá para Canadian Solar. El contrato de explotación es por tres años y la totalidad de los trabajos alcanzan los 84,5 millones de euros. Y la empresa también puso en funcionamiento en octubre del año pasado la planta de 32 MW de Fukoroda, construida sobre un antiguo campo de golf al nordeste de Tokio para la citada X-Elyo.
Ofensiva en el terreno industrial
En los últimos meses, ACS ha desplegado una clara estrategia hacia la potenciación de su división industrial, con la integración de Intecsa Industrial e Initec Energía para acometer grandes obras en el segmento del gas y petróleo, y está tratando de elevar la implantación de Maetel en América, Oriente Medio y Asia. Este brazo de la constructora, con sede central en Zaragoza, irá tomando mayor relevancia a la luz de que es ya finalista en distintos concursos en México, Perú, Panamá y Arabia, además de los citados avances en Japón.
Otros grupos españoles de construcción que tienen declarado interés en la toma de posiciones en proyectos industriales son Sacyr y OHL, al tiempo que Isolux se centrará en esta faceta una vez superado el proceso de reestructuración de deuda en que se encuentra inmerso.
ACS también tiene en la diversificación geográfica uno de sus puntos fuertes. Con amplia implantación en el área Asia-Pacífico (28% de los ingresos totales del grupo), la filial australiana Cimic cerró la semana pasada con la adjudicación de distintas partes de un proyecto turístico, promovido por Market en la ciudad india de Bombay, por unos 150 millones de euros. En concreto, Cimic se encargará de la segunda y tercera fase del desarrollo, levantando un centro comercial y distintos inmuebles para alojamiento. El fin de obra está fijado en 2019.
La misma Cimic se ha hecho con las obras de un parque para el recuerdo de los difuntos de casi 5.000 metros cuadrados y un columbario de ocho plantas que se ejecutarán en Hong-Kong y que parten con un presupuesto de 215 millones de euros.
Antes, el pasado junio, ACS logró abrirse camino en Sri Lanka con un proyecto de suministro de agua, valorado en 100 millones y ganado a través de las filiales Tedagua, Cobra y Makiber. Y de forma paralela, la misma Tedagua se hacía con el diseño de la desaladora Tuas 3, en Singapur. Este último pedido fue calificado por la compañía como “la piedra angular” para el desarrollo de una fuerte presencia en el sur de Asia.