Principales conflictos entre franquiciado y franquiciador
Los mayores problemas surgen generalmente por motivos económicos
Aunque lo más habitual es que la relación entre un franquiciador y sus franquiciados sea buena, en ocasiones, surgen conflictos entre ambas partes. Esto ocurre normalmente cuando el franquiciado considera que la rentabilidad que obtiene de su negocio debería ser más alta.
Según la consultora experta en franquicias, Barbadillo y Asociados, existen siete causas principales por las que se producen las desavenencias.
En primer lugar, el franquiciado a menudo siente que la información proporcionada por la franquicia al firmar el contrato no era del todo cierta o estaba falseada.
Otro motivo recurrente de conflictos es el incumplimiento en el suministro, especialmente en lo que se refiere a las condiciones y plazo de entrega pactados.
El escollo más importante surge por los impagos de los royalties por parte del franquiciado a la franquicia. Dicho royalty debe pagarse aun en el caso en que el negocio no vaya bien y no de beneficios, por lo que en muchas ocasiones el franquiciado se halla en graves dificultades económicas y no puede hacer frente a los pagos.
También pueden producirse enfrentamientos entre las partes cuando el franquiciado no cumple con las normas operativas, como pueden ser la limpieza o la conservación del establecimiento, lo que perjudica claramente la imagen de la marca.
Por otro lado, algunos franquiciados acusan de incumplimiento de contrato a su franquiciador con el único objetivo de independizarse de la cadena, aunque sea para ejercer la misma actividad. Con la experiencia obtenida, pueden continuar un negocio rentable sin tener que pagar un canon.
Otra causa importante de una mala relación entre las partes es el Marketing y la Comunicación que la franquicia se compromete a realizar al inicio de la relación comercial. El franquiciador cobra al franquiciado un canon por esta partida, pero no siempre es transparente en el gasto, como ocurre cuando no se utiliza una cuenta bancaria independiente para dicho fin.
Por último, se dan casos en los que el franquiciado realiza operaciones fuera del sistema informático proporcionado por la central, con el objetivo de ocultar una parte de su facturación y, por tanto, ahorrarse el pago de los royalties correspondientes a esas ventas.
A pesar de ello, lo normal es que la relación entre franquiciados y franquiciadores sea grata, duradera y beneficiosa para ambos. Esto se consigue, sobre todo, cuando la franquicia ha realizado una buena selección de los candidatos que optan a entrar en su negocio.