El Gobierno revisa a la baja el PIB y al alza el déficit, la deuda pública y el paro
Guindos asegura que no serán necesarios nuevos ajuestes para cumplir el objetivo de estabilidad El mayor margen fiscal negociado con Bruselas se repartirá entre el Estado y las comunidades autónomas
El ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, ha presentado hoy en el Congreso de los Diputados las nuevas previsiones macroeconómicas que incluyen una revisión a la baja. El Ejecutivo estima un aumento del PIB del 2,7% frente a la estimación del 3% vigente hasta ahora. Guindos señaló que la revisión responde sobre todo a la ralentización de la economía mundial y defendió que el escenario macroeconómico es favorable.
A pesar de la revisión a la baja, Guindos defendió que “ayer España era un problema en Europa y hoy es una solución”. Aseguró que el país seguirá creando empleo y ganando competitividad respecto a los mercados internacionales. Aun así, la tasa de paro también se revisó al alza. El desemplo se situará en el 19,9%, dos décimas más que en la anterior previsión.
El menor crecimiento económico se acompañará también de un mayor margen fiscal ante la evidencia de que España no tenía ninguna posibilidad de rebajar el déficit público del 5% del PIB registrado en 2015 al 2,8% exigido por Bruselas. En el nuevo cuadro macroeconómico, el Ejecutivo fija el objetivo de déficit en el 3,6%. La relajación equivale a ocho décimas de PIB. Aun así, el nuevo umbral sigue siendo exigente. Rebajar los números rojos al 3,6% del PIB implica una reducción del déficit de 13.749 millones.
Aun así, Guindos aseguró que España puede cumplir el objetivo sin aplicar nuevos ajustes. En su opinión, el acuerdo de no disponibilidad de 2.000 millones anunciados el pasado viernes, las medidas coercitivas para sanear las cuentas autonómicas y los mayores ingresos y menores gastos ligados al propio ciclo económico bastarán para rebajar el desfase hasta el 3,6%.
Para 2017, España prevé que el déficit público se sitúe en el 2,9%, lo que supondría cumplir por primera vez desde 2007 el Pacto de Estabilidad de la Unión Europea. El nuevo objetivo de estabilidad se repartirá entre el Estado y las comunidades autónomas. Así, las regiones verán como el objetivo de déficit del 0,3% del PIB se amplía.
Las nuevas estimaciones también contemplan que la deuda pública se reduzca a un ritmo menor. Así, el nivel de pasivo pasará del 99,2% del PIB en 2015 al 99,1% en 2016 y del 99% en 2017. La Ley de Estabilidad contempla que el nivel de pasivo debería caer hasta el 60% en 2020, un reto que resulta simplemente inabarcable.
Guindos se defendió de las críticas de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal Independiente (Airef), que ayer denunció que el Gobierno incumplió la ley al no remitir en plazo el Programa de Estabilidad para su evaluación. El ministro de Economía reconoció que solo remitió el cuadro de previsiones, pero señaló que hasta el sábado estuvo "coordinando" con el comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, los grandes rasgos del Programa de Estabilidad. Guindos señaló que hay margen para que la Autoridad Fiscal revise el documento que el Gobierno enviará a Bruselas este mes.