Telepizza guarda 45 millones de beneficios en créditos fiscales
Telepizza ha anunciado esta semana su intención de volver, previsiblemente en mayo, a cotizar en la Bolsa española casi una década después de abandonar el parqué. La compañía de pizzas a domicilio cerró el pasado año 2014, últimas cuentas presentadas en el Registro Mercantil, con 90 millones de euros beneficio, frente a los 80 millones de pérdidas de un año antes.
El documento informa de los créditos fiscales del grupo Telepizza. A 31 de diciembre de 2014, acumulaba 45,5 millones en créditos fiscales que podrá usar para mejorar sus beneficios futuros. Esta cantidad se desliza de una base imponible negativa, provocada por las pérdidas de la sociedad dominante o de alguna de las filiales, que se ha repetido de 2001 a 2014, salvo en los ejercicios 2006, 2007 y 2013. Los años más reseñables son 2011, con una base negativa de 14,4 millones; 2008, con 11,9 millones; y 2009, con 7,5 millones. En 2014, pese a obtener beneficios, se apunta 756.000 euros de base imponible negativa.
Las cuentas completas de 2015 no se conocen hasta la fecha y se prevé que se presenten ya en el folleto que está redactando junto a la CNMV para emprender la salida a Bolsa que está prevista para mayo y donde prevé obtener entre 500 y 600 millones.
- Lastrados por la deuda
Telepizza, una década fuera de la Bolsa
2006: El grupo sale de Bolsa tras la adquisición por parte de Permira y la familia Ballvé. Se la valoró en unos 850 millones.
2014: A finales de año, emprende una refinanciación de la deuda y una reestructuración accionarial que da entrada a KKR en el accionariado.
2016: La compañia anuncia su intención de volver a cotizar en el parqué a partir de mayo.
La compañía de pizza ha visto sus resultados de los ejercicios deteriorados desde la entrada del capital riesgo de Permira en 2006, debido a los aspectos contables de la operación que se traducían en unos costes financieros mayores que la cifra de negocios de la firma de reparto de pizza a domicilio. Desde entonces el resultado final de las cuentas ha enganchado ocho ejercicios en negativo.
Pese a esta evolución financiera desde 2006, la compañía explicó en el anuncio de su intención de salida a Bolsa que desde que estallase la crisis ha mantenido un crecimiento más o menos constante de apertura de establecimientos y de nuevos mercados, pasando de 876 tiendas en 2006 a 1.311 en 2015
La tendencia de aumento de los costes financieros de Telepizza se frenó en otoño del año 2014. La compañía emprendió una reestructuración de su deuda, que se tradujo en la entrada de un nuevo fondo de capital riesgo, KKR, en el accionariado.
En la citada operación de refinanciación y de reestructuración del capital de Telepizza, el grupo redujo su pasivo de 485 millones a 285 millones. Este hecho se tradujo en un recorte del la deuda neta desde las 7,3 veces el ebitda a 3,7 veces. La compañía prevé ahora emprender una ampliación de capital, dentro de su operación de salida a Bolsa, en la que destinará parte a reducir el pasivo y así llegar al parqué con unas cuentas más saneadas. Tras la reestructuración, su deuda neta rondaba los 300 millones de euros. Una parte del dinero que se logrará con la ampliación se destinará a reducir este importe hasta el entorno de los 160 millones. Lo que sí se ha avanzado de las cuentas de 2015 son los datos de ventas y ebitda, aportados por la compañía en el anuncio de su salida a Bolsa. Las ventas en cadena de la empresa, sumando franquicias y restaurantes propios, fueron de 491 millones. Los ingresos, de 328,9 millones, que comparados con las cuentas de 2014 supone un crecimiento del 13% en los ingresos de la sociedad. Por su lado, el ebitda fue de 57,7 millones.
La deuda neta de Telepizza frente a su ebitda de 2015, tras la operación, quedaría en unas 3,1 veces.
Reducir la deuda y potenciar su expansión
La operación de salida a Bolsa de Telepizza se realizará en dos fases. Una primaria que conllevará la ampliación de capital y una secundaria que supondrá la venta de acciones ya existentes de sus actuales accionistas. La primera parte irá destinada a reducir la deuda, que en 2014 superaba los 280 millones; a sufragar los gastos de la salida a Bolsa, y a “pagar y conceder determinados préstamos a sus directivos bajo planes de incentivos”. En total, se propone sacar a Bolsa acciones por entre 500 y 600 millones de euros. La valoración del grupo oscilará entre los 800 y los 1.200 millones.
Los planes del grupo pasan también por una nueva estrategia de crecimiento apoyada en cuatro pilares e impulsada por los ingresos de su salida a Bolsa. En primer lugar, una de las prioridades de la empresa pasa por mejorar el crecimiento de las ventas comparables, conocidas por like for like, tanto en España como en el extranjero. Para ello, prevé abordar una renovación de los establecimientos, así como mejorar la plataforma digital y móvil. En segundo término, Telepizza pretende acceder a ubicaciones nuevas para mejorar la cobertura en areas donde carece de presencia importante. Así, apunta a uma mejora de su presencia en centros comerciales y la apuesta por nuevos formatos como las “minitiendas”.
La empresa pone también el foco en los nuevos mercados en los que buscará aliarse con socios locales que apoyen su entrada a través de contratos de máster franquiciados, limitando con ello la necesidad de inversiones de capital y mejorando la penetración en “áreas sin explorar”. Por último, la compañía pretende reforzar su posición como principal compañía de reparto de pizzas a domicilio no estadounidense, aprovechando las oportunidades de un mercado global “que sigue fragmentado”.