Iglesias consultará a las bases su postura final en la investidura
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha propuesto hoy ante el Consejo Ciudadano Estatal de su partido someter a consulta ante los inscritos cualquier decisión que adopte el partido sobre la conformación de gobierno tanto si hay acuerdo con el PSOE como si la posibilidad es elegir ir a nuevas elecciones.
En su discurso ante los 81 miembros del Consejo Ciudadano, Iglesias ha asegurado que en ningún momento Podemos se ha planteado la abstención a un pacto “continuista” que prolongue las políticas del PP y que sólo baraja dos escenarios: un pacto con el PSOE para un “gobierno de cambio” y “a la valenciana”, o nuevas elecciones.
Ante esos escenarios, el secretario general de Podemos ha planteado que “una cuestión tan crucial” la debe decidir “la gente”, es decir, “los inscritos” en Podemos, por lo que ha propuesto convocar esa consulta para que sean ellos quienes tengan “la última palabra”.
Iglesias ha expuesto ante los miembros de su dirección que hasta ahora la única opción de investidura que se ha puesto sobre la mesa es una “variante” de la gran coalición, que Ciudadanos no ha ocultado su objetivo de atraer al PP a su pacto con el PSOE, y que Podemos no va a traicionar ni a su programa “ni a su gente”.
No obstante, ha explicado que han “comprendido” que en política “hay que ceder” para buscar acuerdos y que Podemos, por ello, ha transigido en algunas cuestiones programáticas y va a seguir explorando la opción de lograr un gobierno de coalición con el PSOE.
“Si finalmente no fuera posible porque el resto no está dispuesto a ceder, asumiríamos una nueva convocatoria electoral con la voluntad de ganar las elecciones”, ha manifestado después de recalcar que siguen “teniendo la mano” al PSOE para lograr ese acuerdo, a pocos días de la primera reunión que celebrarán a finales de esta semana con los equipos negociadores de socialistas y C's.
“Seremos oposición si no queda más remedio, no nacimos para ser oposición, sino para gobernar, y estamos dispuestos a lograr acuerdos para gobernar”, ha enfatizado.
Aunque eso implique, ha sostenido, “surfear contradicciones”, y siendo conscientes de que “gobernar en buena medida es ceder y gobernar en buena medida es decepcionar”.
Según ha dicho el líder de Podemos, “a veces es muy cómodo situarse en posiciones maximalistas de oposición”, pero Podemos ha renunciado a esa “comodidad”, y ha recordado precisamente que han criticado la posición histórica de la izquierda que no compartía que hay que “mancharse las manos con responsabilidades de gobierno”.
“No nacimos para ser los contestatarios en el Parlamento, ni para ser una fuerza que se limite a trasladar las quejas o ser la fuerza de la indignación, sino para convertir la indignación en políticas” y cambiar las cosas desde las instituciones, ha argumentado.