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El selectivo cede un 1,66%, aunque se anota su primer mes del año en positivo

La escalada del euro y la corrección de la banca ponen el freno al Ibex

Vista de una pantalla en la Bolsa de Fráncfort, Alemania.
Vista de una pantalla en la Bolsa de Fráncfort, Alemania. EFE

Sesión de transición para los mercados europeos. Después de que la presidenta de la Reserva Federal colmara de euforia a los parqués tras incidir en la cautela de la subida de tipos en EEUU, las Bolsas han frenado hoy el ritmo alcista a la espera de nuevos datos macroeconómicos que marquen el rumbo en las próximas jornadas.

Ante este escenario, los parqués han recibido la última sesión del mes con signo negativo, un signo en el que el sector bancario ha vuelto a incidir, desatando las ventas en todo el continente y llevando a las caídas a los principales índices europeos.

En el mercado español, el Ibex no ha podido salvarse de las pérdidas. El selectivo, que iniciaba la jornada tratando de reconquistar los 8.900 puntos, se ha quedado mucho más lejos de lo que hubiera imaginado tras registrar una caída del 1,66%, hasta los x8.723,1 puntos. Pese a que ha logrado cerrar marzo en positivo, con un ascenso del 1,3%, el Ibex encadena su cuarto trimestre consecutivo de caídas. Entre enero y marzo, el selectivo cede un 8,6% y no registra un saldo trimestral positivo desde el primer trimestre de 2015, cuando subió un 12%.

Hoy, las caídas en el parqué han venido, nuevamente, de los bancos, que han vuelto a verse lastrados por la debilidad del alemán Deutsche Bank, que continúa con su mala racha después de que confirmara que el año 2016 se saldará sin apenas ganancias, además de la banca italiana, después de que se conociera que la emisión de derechos de Banca Popolare di Vicenza podría verse retrasada si las condiciones de mercado no mejoran. Con ello, valores como Popular (-3,01%), Santander (-2,57%) o Sabadell (-2,65%) han acabado impidiendo los ascensos del parqué. El único valor que ha conseguido librarse de la quema ha sido ArcelorMittal (+3,84%). Y es que la siderúrgica ha acabado siendo la ganadora de este primer trimestre, al anotarse más de un 30%, después de haberse visto golpeada durante los dos primeros meses por las continuas caídas en el precio del crudo. Junto a ArcelorMittal, Indra y FCC se han colocado en el podio de los mejores valores del primer trimestre. 

En el Viejo Continente, pese a cerrar en mejor situación que el índice español, los principales parqués europeos han acabado sumidos en las pérdidas. Las palabras de Janet Yellen sobre la cautela en la subida de tipos en EEUU, que habían animado a las compras a los inversores el pasado martes, han quedado olvidadas hoy. Y es que la fortaleza del euro que se ha derivado de la intervención de la presidenta de la Fed tiene claros perjudicados en Europa: las compañías exportadoras, que vuelven a sufrir la desconfianza de los inversores a medida que la moneda única gana posiciones frente al dólar. Así, el Footsie británico se ha dejado un 0,4%, el Cac francés ha cedido un 1,2%, el Mib italiano ha caído un 1,2% y el Dax alemán ha retrocedido un 0,8%, perdiendo así los 10.000 puntos que había recuperado durante la jornada anterior.

Al otro lado del Atlántico, Wall Street ha recibido inicialmente los malos datos de las peticiones semanales de desempleo mejor de lo esperado. Pese a que estas se han elevado hasta las 276.000 frente a las 265.000 previstas por los analistas, los principales índices en EE UU se han mantenido en positivo durante la tarde. Sin embargo, al cierre del mercado, el Dow Jones ha perdido un 0,18% y el S&P se ha dejado un un 0,20%, aunque el Nasdaq se ha anotado un 0,01%.

A estos ascensos ha contribuido el comportamiento del crudo, que ha vuelto a las subidas gracias a la debilidad del dólar, acercándose así a los 40 dólares y muy lejos de sus mínimos de enero, cuando cotizó a 27,88 dólares.

En el mercado de divisas, la pérdida de posiciones del billete verde ha llevado al euro a firmar nuevos máximos anuales, hasta alcanzar los 1,14 dólares. El previsible cambio de rumbo en las políticas monetarias de la Fed, con el que pretenden atrasar las próximas subidas de tipo , ha provocado que el dólar caiga en marzo frente a las principales divisas de todo el mundo.

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