El Ibex logra salvar una sesión de volatilidad con un empate del 0,03%
Los mercados han optado por tomarse un respiro. La buena racha de las últimas jornadas en las Bolsas de todo el mundo ha servido de excusa para que los inversores acudieran a recoger beneficios. Pese a que un cierre al alza procedente de Asia auguraba una nueva jornada de subidas, la volatilidad ha acabado instaurándose en las plazas europeas. Con ello, los principales índices en el Viejo Continente han acabado debatiéndose entre las ganancias y las pérdidas cotizando sin un rumbo claro.
Aunque el selectivo ha transitado con calma tratando de mantenerse en terreno positivo, finalmente ha salvado la sesión con un empate del 0,03%, hasta los 8.767 puntos. Pese a ello, la mayoría de valores del parqué español han corregido las subidas de las últimas sesiones, aunque el recorte podía haber ido más allá, ya que los datos macroeconómicos no han ayudado a los ascensos.
Y es que el ritmo de expansión de la actividad del sector servicios español ha mostrado, por tercer mes consecutivo, una ralentización en febrero como consecuencia del impacto de la incertidumbre política, según el índice PMI, que ha bajado a 54,1 puntos desde 54,6 el mes anterior, lo que supone su peor lectura desde noviembre de 2014. Pese a ello, el Ibex ha registrado el mejor comportamiento en el Viejo Continente tras el Mib italiano. Las caídas del selectivo han estado llideradas por IAG(-2,62%), Gamesa (-1,52%) o Indra (-2,76%), además del sector de la banca, que ha frenado los ascensos con los que había catapultado al Ibex en jornadas anteriores. En el lado opuesto, Repsol (+3,43) ha encadenado su sexto repunte consecutivo impulsando, además, la cotización de Sacyr (+7,52%), que ha liderado las subidas en el parqué, junto con ArcelorMittal (+3,3%), que ha continuado con su rally apoyado en la estabilización en el precio de las materias primas.
En el Viejo Continente, los principales índices han estado registrando durante toda la jornada un comportamiento dispar. “Hasta que se vayan aclarando las incógnitas sobre la acción de los bancos centrales, el crecimiento y la liberalización financiera en China, la evolución del precio del petróleo, de la inflación, de los bancos comerciales y las diferentes contingencias políticas nacionales (referéndum británico para salir de la UE, formación de gobierno en España, entre otros), los mercados financieros van a evolucionar con una volatilidad superior a la normal”, apuntan desde el departamento de estrategia de mercados de Banca March.
Con todo ello, las plazas europeas han acabado decantándose por las pérdidas, excepto el Mib italiano, que ha sido el único en salvarse de la quema. Mientras tanto, el crudo, tras una jornada de continuas caídas remontaba hasta situarse por encima de los 37 dólares, registrando un ascenso del 0,37%.
Al otro lado del Atlántico, Wall Street recibía los malos datos del PMI de servicios con una apertura a la baja. El índice retrocedía desde los 53,2 puntos de enero hasta situarse por debajo de los 50 puntos por primera vez en dos años y medio. Sin embargo, al cierre del mercado estadounidense, cambiaba el rumbo: el Dow Jones se anotó un 0,26%, el S&P subió un 0,35% y el Nasdaq registró un alza del 0,09%.
En el mercado de la deuda la estabilidad ha acabado siendo la principal protagonista. El interés del bono español a 10 años se ha situado en el 1,53%, desde el 1,57%. Por su parte, la prima de riesgo se ha mantenido en los 136 puntos básicos.
En el mercado de divisas, sin embargo, sí que ha habido movimiento. El euro ha conseguido escalar hasta los 1,09 dólares, a la espera de las medidas que el mercado prevé que Mario Draghi lleve a cabo para estimular la economía.